El lunes la Alcaldía decidirá si declara la alerta naranja en toda la ciudad por la crisis del Covid-19
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Hasta que llegó el coronavirus a Bogotá, las unidades de cuidados intensivos (UCI) no eran un tema que despertara tanto interés como el que suscitan ahora.
No obstante, el Covid-19 convirtió a estos equipos médicos en un punto de referencia para determinar hechos cruciales de la vida cotidiana en medio de esta pandemia y en estos momentos, el futuro de la ciudad a corto plazo, depende de la ocupación de UCI que hasta ayer a las 8:00 de la noche se mantenían en 54,6%, según registros de Saludata.
A finales de mayo, cuando la alcaldesa Claudia López extendió la cuarentena en Bogotá por 15 días más, la mandataria ya había dicho que, cuando la ocupación de UCI llegara a este porcentaje, la totalidad de Bogotá volvería a una cuarentena rigurosa.
Y de hecho, la Alta funcionaria añadió que, “con el respaldo del Ministerio de Salud, si llegamos a ese 50%, vamos a asumir la rectoría, referencia y contra referencia de todas las UCI públicas y privadas de la ciudad para que no ocurra que haya unidades disponibles pero, como no son de ciertos pacientes de ciertas EPS o IPS, no se están usando cuando otros sí las necesitan”.
Aunque al cierre de esta edición ninguna de las dos cosas había pasado, parece cuestión de tiempo que se decrete la alerta naranja en la ciudad. La Alcaldesa dijo que probablemente el lunes se tomarían determinaciones de manera conjunta con el Gobierno nacional, y que las UCI pasen a ser controladas por el Distrito sin intermediación de las Entidades Prestadoras de Salud (EPS).
Como se dijo, ayer en la noche la ocupación de las UCI estaba en 54,6%, es decir que subió frente al 53,46% del jueves. De acuerdo a Saludata, el viernes cerró con una ocupación de 394 camas (de 722 disponibles para pacientes Covid), de las cuales 152 están siendo ocupadas por casos confirmados de coronavirus y otras 242 son de pacientes probables de padecerlo.
De hecho, anoche la alcaldesa López informó que se reunió con el ministro de Salud, Fernando Ruiz; la directora del Instituto Nacional de Salud, Marta Ospina, así como con Carlos Álvarez, experto que representa a Colombia ante la OMS. Con ellos se analizó la evolución de la pandemia en la ciudad, la ocupación de las UCI y las medidas a “tomar, que anunciaremos el fin de semana”.
Lo que viene
Sin embargo, la pregunta se mantiene, ¿se decretará una alerta naranja en la ciudad? De acuerdo con el epidemiólogo Luis Jorge Hernández, profesor de la Universidad de los Andes, el Distrito Capital tiene que trabajar en dos extremos:
Por una parte, debe seguir aumentando su capacidad de camas UCI, alegando que Bogotá debería tener en estos momentos por lo menos 2.000 camas para Covid-19 y tiene casi 1.000 camas disponibles en este momento; y por el otro, debe evitar que las personas que están hospitalizadas lleguen a cuidados intensivos.
“¿Cómo lo podemos evitar? Reforzando todas las medidas de testeo masivo, realizar exámenes masivos, identificar contactos, identificar cadenas de transmisión y aislar a las personas. Bogotá seguramente no podrá, por lo menos hasta finales de junio, liberar más sectores para la economía por el alto riesgo. Estamos en una situación realmente de riesgo y está bien que se declare la alerta naranja”, le dijo a EL NUEVO SIGLO el epidemiólogo.
De acuerdo con Hernández, el porcentaje ocupacional de las UCI, “seguramente en los próximos días puede llegar al 70% de ocupación. Lo más importante ahí es que no se vayan a saturar estas unidades, pues eso es lo que pone en riesgo de muerte a las personas. ¿Qué mató a los pacientes en España, en Italia y en Nueva York? Que las personas requerían unidades de cuidados intensivos y no había disponibilidad de las mismas. Es riesgoso”, finalizó diciendo.
Sobre este porcentaje de ocupación para los próximos días coincidió el director del Departamento de Ingeniería Biomédica de la Universidad de los Andes, Juan Manuel Cordovez, quien le dijo a este Diario que “yo comparto esa apreciación. Un 60% en una semana. Nosotros pensábamos que a finales de junio, es decir, que en tres semanas íbamos a llegar al 100% de lo que sabíamos, estaba disponible. Entonces sí tiene sentido que en las próximas dos semanas avancemos de 10 a 15% por semana”.
Adicionalmente, el profesor dijo que, aunque no es ideal decretar una alerta naranja en estos momentos, es una medida sensata. “La idea de poner a una ciudad en toque de queda como respuesta a un crecimiento de los casos y luego volver a liberar, y luego volver a cerrar yo creo que no es ideal, pero sí estoy de acuerdo con que, para evitar un colapso, se lleve a cabo una medida de este tipo, pues tendrá un efecto positivo en la disminución de llegada de pacientes a los hospitales”, sostuvo el profesor a este medio.
Por localidades
Frente a la ocupación de camas por localidades, Kennedy es la localidad con el mayor número ocupadas, con 42. A ella le sigue la localidad de Suba con 15; en tercer lugar se encuentra la localidad de Engativá con 12 y en cuarto lugar se encuentra Ciudad Bolívar con 10 camas ocupadas.
La localidad de Bosa, que curiosamente es la segunda zona de la ciudad con el número de contagios, ocupa el quinto lugar con siete camas UCI ocupadas, al igual que las localidades de Fontibón, San Cristóbal, Rafael Uribe Uribe y Usaquén, todas ellas con 7 UCI ocupadas.
La localidad de Puente Aranda y de Santafé ambas tienen cinco equipos ocupados respectivamente, Usme tiene tres, Los Mártires tiene dos, Chapinero tiene seis, Teusaquillo tiene cuatro, Tunjuelito tiene tres, Antonio Nariño tiene una, y Barrios Unidos y la Candelaria tienen dos camas ocupadas respectivamente. Otras variables, sin dato, tienen dos ocupadas, y fuera de Bogotá, hay una ocupación de tres camas UCI.