Con reclamos por el manejo de la agenda legislativa y de las relaciones con las bancadas llegarán los dirigentes partidistas a las reuniones programadas para el final de este mes con el presidente Iván Duque.
Como lo ha publicado EL NUEVO SIGLO, la ministra del Interior, Nancy Patricia Gutiérrez, anticipó que dichos encuentros servirán “para dejar claro el alcance de los proyectos y para que el Gobierno conozca cuál es la opinión sobre la agenda legislativa de 2019, que arranca en febrero con el Plan Nacional de Desarrollo (PND)”.
Según Gutiérrez, “el Presidente ha dicho que convocará a los partidos políticos de Gobierno y a los independientes para revisar la posibilidad de un acuerdo en torno a algunos de los temas que quedan sobre la agenda, empezando con las reformas constitucionales que van para la segunda vuelta y los demás proyectos, para identificar cuál es la visión de los partidos frente a esos temas. En términos generales, el presidente Duque ha convocado a un pacto por Colombia, pacto por la equidad, que es el Plan Nacional de Desarrollo”.
Sin embargo, ya se escuchan reclamos por parte de las colectividades.
El presidente del Directorio Nacional Conservador, Hernán Andrade, dijo que los congresistas de su colectividad tienen “una queja, un reclamo de que las agendas no solo deben ser las del Gobierno nacional. Si uno es partido de gobierno es para que le escuchen sus propuestas, no para ir a hacer notario de propuestas del Ejecutivo por importantes que sean”.
El senador Efraín Cepeda anotó que no permitirán que el Partido Conservador se convierta en un convidado de piedra en la coalición de gobierno.
“El Partido Conservador es un partido de gobierno al que no se le tienen en cuenta sus proyectos, al que no se le tienen en cuenta sus proposiciones en los debates y que tiene una baja interlocución con los ministros frente a los proyectos presentados”, indicó.
En cambio los reclamos en las toldas del Partido Social de Unidad Nacional (La U) son principalmente internos. Como se sabe, hay una minoría dentro de esa organización política que hubiera preferido declararse independiente y no alinearse con el Gobierno.
El exministro Aurelio Iragorri, presidente de la colectividad, manifestó que “la división nos afecta y es necesario reunificar criterios. Y eso es lo que queremos hacer en los próximos días, antes de la reunión con el presidente Duque, que dicen que será en la segunda o la primera semana de febrero”.
Con todo, también hay llamados de atención al Gobierno: “Nosotros le mandamos al Presidente una carta desde septiembre, cuando el partido se declaró de gobierno, motivándolo a convocar un gran acuerdo nacional para la agenda legislativa. La carta ni la contestaron. Creo que le hubiera rendido más el periodo legislativo anterior si nos hubiera hecho caso, porque hoy los resultados son bastante malos”.
“La decisión fundamental es si el partido logra su unidad y define sus banderas. Y eso se puede lograr si nos convertimos en la gran fuerza de centro que está pidiendo el país. Hoy a La U no nos ubican en ninguna parte. Somos de gobierno, pero nos identifican con Santos y nacimos con Uribe. Es decir, fuimos uribistas, pero todos apoyamos el proceso de paz, y eso es lo que ha generado es desconcierto en la opinión pública y al interior del partido. Creo que si hay voluntad entre todos, lo logramos”, expresó.