Cómo responder ante La Niña desde el sector productivo | El Nuevo Siglo
Las lluvias causan estragos cuando vienen en exceso./ Alejandro Avendaño -ENS
Martes, 23 de Julio de 2024
Redacción Bogotá

Según el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) en Colombia, existe una probabilidad del 69% de que las precipitaciones y fuertes lluvias se presenten durante todo el segundo semestre de este año.

La Niña es un fenómeno climático natural que ocurre en el Océano Pacífico, con implicaciones locales y globales para la salud y la seguridad de las personas, la propiedad, la infraestructura, así como a la producción agrícola y la prestación de los servicios públicos, y la gestión de la cadena de suministro. Este fenómeno se manifiesta con una mayor nubosidad y lluvias intensas, especialmente en las regiones Andina y Caribe.

 

Para este segundo semestre del año, se prevén precipitaciones intensas que podrían resultar en inundaciones, crecientes súbitas y deslizamientos de tierra. Además, este fenómeno climático amplía la posibilidad de riesgos, que deben ser abordados con atención por parte de gerentes de riesgos, profesionales de seguros y líderes empresariales, quienes deben comprender en detalle estos complejos patrones para tomar decisiones estratégicas efectivas.

Sobre esto, Rodrigo Suárez Castaño, líder de Sostenibilidad para Latinoamérica y el Caribe de Marsh McLennan, señaló que “la crisis climática, la contaminación ambiental y la pérdida de biodiversidad, son algunos de los principales retos del Siglo XXI en materia de sostenibilidad. Son elementos que podrían generar daños en la infraestructura, reducir la productividad laboral, el capital humano y ocasionar pérdidas en la agricultura. Además, la deforestación y la incapacidad para regenerar la biodiversidad minimizan la disponibilidad de recursos naturales esenciales. Afrontar esta crisis requiere estrategias para afrontarlas en el mediano y corto plazo”.

 

En ese sentido, y para poder hacerle frente a este situación que trae consecuencias en la producción y economía, algunas acciones que se pueden tener en cuenta para evitar daños mayores, de acuerdo con Marsh McLennan, incluyen:

1.  Evaluaciones de Riesgos: Realizar evaluaciones exhaustivas para identificar vulnerabilidades en sus operaciones y comprender los impactos, incluyendo posibles daños físicos o pérdidas financieras.

2.  Resiliencia de la Cadena de Suministro: Construir la resiliencia estableciendo relaciones con múltiples proveedores, obteniendo suministros de diferentes regiones o manteniendo un inventario adecuado.

3. Planes de Respuesta y Continuidad del Negocio: Desarrollar planes sólidos de respuesta ante desastres y continuidad del negocio antes y después del evento.

4. Comunicación y Colaboración: Mejorar la comunicación y colaboración con las partes interesadas clave, incluyendo agencias gubernamentales y comunidades locales.

5. Inversión en Infraestructura: Invertir en infraestructura y tecnologías resistentes al clima; incluidas las soluciones basadas en la naturaleza.

6.     Investigación y Ciencia del Clima: Mantenerse informado sobre las últimas investigaciones y avances en la ciencia del clima y adaptar las estrategias en consecuencia.

7.     Evaluación de Programas de Seguros: Evaluar y someter a pruebas de estrés los programas de seguros y los procesos de reclamaciones para que sean lo más receptivos posible en caso de que ocurra lo peor. Explorar soluciones paramétricas innovadoras para llenar posibles vacíos en los programas de cobertura y estrategias de recuperación.