Cinco años de plazo tiene el Estado colombiano para sustituir el asbesto por otros materiales menos nocivos para la salud, así lo ordenó el juez 39 administrativo de Bogotá, a raíz de un proceso que cursaba desde el 2006, cuando el ciudadano Juan José Lalinde presentó una acción popular.
Lalinde, en su solicitud pidió expresamente que el material químico fuera eliminado y prohibido en el país. Sin embargo, el juez Leonardo Galeano determinó que se dará ese plazo para hacer un proceso transitivo, en vez de la sustitución definitiva.
Cuando el juez evaluó las pruebas definió que no hay un uso seguro del asbesto, para que no afecte la salud de las personas a corto y largo plazo.
Dentro de los factores que el juez evaluó están los pronunciamientos de las organizaciones internacionales que le dan a este material la etiqueta de perjudicial para la salud, es decir que no hay unas condiciones mínimas para evitar afectaciones.
Teniendo en cuenta además, que esto también afecta a las personas de la comunidad que se encuentran cerca de quienes manipulan el asbesto.
Reacciones
Ante la decisión de Galeano, varias organizaciones y colectivos que están en contra del asbesto, mostraron su contento y expresaron su alivio, pues la lucha de varios años y numerosos intentos fallidos, al fin tuvo éxito.
“Lo que dice esta sentencia es que el asbesto no es seguro y que los ciudadanos no pueden seguir expuestos a él debido a sus nefastas y hasta mortales consecuencias. Es un fallo macizo y contundente que, además, deja expuesto que el Estado y el sector privado han permitido el uso indiscriminado de esta peligrosa sustancia durante décadas”, dijo Silvia Gómez, directora de Greenpeace Colombia.
En el Congreso
El Congreso aún no ha definido la situación del asbesto y fue en diciembre pasado cuando ocurrieron nuevos avances en su proceso para convertirse en ley.
En una pasada entrevista a EL NUEVO SIGLO, la senadora conservadora Nadia Blel, autora de la iniciativa para que se prohíba el asbesto en el país, dijo que, como dependen varios trabajadores de su producción, se contempla un plazo de cinco años para que sea eliminado.
En ese sentido, la legisladora manifestó que en Colombia también existen cifras alarmantes. “Son más de 1.744 casos de cáncer de pulmón atribuibles a la exposición al asbesto en los últimos cinco años y 250 casos de mesotelioma en el último quinquenio”, indicó.