EL SISTEMA Nacional de Información de Educación Superior (SNIES) presentó el informe de 2018 sobre los datos de matrículas en las instituciones de educación superior en Colombia. Como hecho relevante, por segundo año consecutivo se presenta una reducción en la matrícula, eso deja en evidencia que las universidades cada vez reciben menos estudiantes.
La situación se puede ver por tres motivos: los poblacionales, los culturales y los económicos. En los poblacionales es evidente que la población colombiana está envejeciendo. Según el último censo poblacional en promedio una familia colombiana tiene dos hijos, frente a los cuatro de hace 30 años y las tasas de natalidad son menores en las familias de ingresos económicos más altos. Hace 20 años era común encontrar a tres hijos en edad universitaria ahora ya es extraño encontrar a dos. La situación requiere medidas de atención porque si las tendencias se mantienen, en 30 años Colombia será un país de ancianos, lo que tendrá implicaciones en los aportes de pensión y el sistema de la salud del país.
Las culturales evidencian que hay un desinterés creciente por estudiar programas de educación superior. Hay generaciones que están interesadas en el emprendimiento, en los proyectos alternativos, no les interesa la empleabilidad tradicional, así que sumado a la reducción poblacional, muchos jóvenes de clase media o alta que pueden pagar la educación privada, están buscando otras opciones. Lo anterior lleva a replantear que la oferta educativa se conecte con las realidades de los cambios culturales y sociales.
La matrícula se ha reducido sobre todo en el sector privado. Pero el SENA, Servicio Nacional de Aprendizaje, la institución técnica y pública más grande del país, es la que ha perdido más estudiantes. La reducción en las privadas evidencia un factor es económico, la dificultad para pagar las matrículas en universidades que no están subsidiadas, y refleja también la dificultad por ampliar la oferta de cupos en las universidades estatales, que al ser subsidiadas son a las que pueden acceder la mayoría de los colombianos.
Las que más perdieron estudiantes
Las cifras muestran que la mayor reducción se presenta en el Sena, lo que evidencia que los programas técnicos tampoco están creciendo, pues en otros países el aumento de la formación técnica ha justificado la reducción de la educación universitaria formal. Además, la reducción de estudiantes en el SENA afecta los indicadores de desempleo, porque son 35 mil o más personas que aparecen como desocupadas cuando podrían estar estudiando.
El informe no es solo sobre deserción, presenta un panorama sobre las matrículas y programas en el país, por ejemplo, con casi 780 mil estudiantes matriculados, el área de economía, contaduría y afines es la más estudiada en Colombia, les siguen las ingenierías y las ciencias humanas con 655 y 435 mil estudiantes respectivamente.
1´557 mil colombianos estaban estudiando en 2018 una carrera universitaria de pregrado, frente a 598 mil estudiantes de programas tecnológicos, 68 mil en maestrías y 6.200 hacen doctorado.
Los diez departamentos como mayor número de matriculados son:
Bogotá : 792.583
Antioquia: 334.374
Valle del Cauca: 179.013
Atlántico: 133.998
Santander: 128.975
Cundinamarca: 79.521
Bolívar: 76.117
N. de Santander: 70.912
Boyacá: 65.715
Caldas: 51.034
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