Para el senador Name hay un vacío jurídico en la comercialización y uso de esos productos

Sujetar los sistemas de fumado y vapeo a las medidas normativas y reglamentarias contenidas en la Ley 1335 de 2009, con el fin de evitar que estos productos sigan atentando contra la salud de los colombianos, es lo que pretende la iniciativa que promueve el senador José David Name, del Partido Social Unidad Nacional (La U).

La propuesta contempla incluir dentro de dicha ley a los Sistemas Electrónicos de Administración de Nicotina (SEAN), los Sistemas Similares Sin Nicotina (SSSN) y los Productos de Tabaco Calentado (PTC) para que se sometan a las prohibiciones generales allí contenidas, como: impedir la promoción, patrocinio, venta, distribución y la iniciación de no fumadores, especialmente menores de edad, así como prohibir su uso en interiores, sobre todo en aquellos en donde es restringido fumar.

De acuerdo con el proyecto radicado el 3 de octubre, los motivos se centran en que existe un vacío jurídico en la comercialización y uso de estos productos y aparte, “todas las formas de consumo de tabaco son nocivas, incluidos los nuevos sistemas electrónicos de administración de nicotina. El tabaco es intrínsecamente tóxico y contiene carcinógenos, incluso en su estado natural”.

La propuesta explica que en Colombia los consumidores de cigarrillos eléctricos y vapeadores han aumentado exponencialmente en los últimos años. “De acuerdo con estudios recientes, los vapeadores cada vez desplazan más al cigarrillo tradicional, a tal nivel que la venta de dispositivos electrónicos generará 14 millones de dólares en Colombia este año”, se lee en el documento.

Aunque expone que el humo que se libera por medio de estos dispositivos “contiene un menor número de sustancias tóxicas, siguen habiendo componentes volátiles orgánicos e hidrocarburos policíclicos aromáticos en su humo que pueden ser dañinos”. Y resalta que la nicotina, las sustancias utilizadas para vapear pueden contener plomo, tolueno, formaldehído, cadmio y acetaldehído, entre otras sustancias tóxicas.

Otra de las problemáticas que expone la propuesta, es que la publicidad que se hace a estos dispositivos representa un “peligro real”, debido a que se promocionan como soluciones para combatir la adicción a la nicotina, lo cual según la iniciativa “aún genera debate entre la academia pues no está totalmente comprobado” y porque se venden como elementos sofisticados que pueden llamar la atención de los menores de edad.

Frente a lo anterior, el proyecto de ley plantea que la adición de la “normatividad actual debe realizarse lo antes posible dado que los productos aquí reseñados son de rápida y fácil comercialización por la forma tan llamativa e inofensiva como son presentados al público regular, que en su mayoría desconoce las reales implicaciones de su consumo”.

La iniciativa propone que dentro de la actual ley que previene y garantiza los derechos de la salud de menores de edad, se incluyan las definiciones de los aspectos en relación al consumo de cigarrillo como el área cerrada, el humo de tabaco ajeno y ambiental, fumar, lugar de trabajo, espacios y transportes públicos, cigarrillo, tabaco y sus derivados, con el fin de que esta población  conozca sobre el tema y tengan claro lo que implica el consumo de estos productos electrónicos.