Fueron capturados 13 policías en Norte de Santander por presuntamente hacer parte de una red ilegal dedicada al contrabando de hidrocarburos. Según información de la Fiscalía, los uniformados dejaban pasar gasolina desde la frontera con Venezuela a cambio de sobornos.
El ente acusador explicó que el combustible era almacenado en bodegas para después ser distribuido y comercializado, por pagos de casi $10 millones para cada policía adscrito a la Estación de Policía de Río de Oro, Cesar.
Los 13 policías fueron identificados como el teniente Duberney Buriticá Vázquez; el intendente jefe Eudelio Corredor Corredor; el intendente Edwin Ramón González Franco; y los patrulleros José Lobo Vivas, Germán Alfonso Santamaría Arguello, Marco Aurelio Molina Núñez, Sergio Antonio Acosta Martínez, Héctor José Rodríguez Vila, Luis Fernando Vargas Ríos, Maicol José Pérez Rivera, Eduardo Antonio Carrascal Durán, Eduardo Rojas Botello y Álvaro Rivera Quintero. Asimismo, fueron capturados los civiles Maicol José Pérez Rivera y José Lobo Vivas.
Estas detenciones fueron legalizadas por el juez de control de garantías de Valledupar y la Fiscalía les imputará cargos por los delitos de concierto para delinquir,e favorecimiento por servidor público de contrabando de hidrocarburos y cohecho.
Según investigaciones adelantas por la Policía, las regiones más vulnerables para que se cometa este delito son Bogotá, la Guajira y Nariño.