En total se han creado 27 de estas figuras, pero sus resultados generales suscitan más preguntas que respuestas
En exactamente dos meses y medio se ha creado una bancada informal por semana, así como una comisión accidental cada 5 días de los 75 que han corrido de este 2020.
¿Es esta una cifra demasiado alta, a qué se debe y qué tan efectivos son, considerando que estos se dan como espacios adicionales a los que ordinariamente tiene el Cabildo distrital para asumir la discusión de temas específicos de relevancia para la Ciudad?
La nueva secretaria general del Concejo, Ilba Johana Cárdenas, le explicó a EL NUEVO SIGLO que este Concejo es, “en todos los términos, nuevo”, pues se está rigiendo por un nuevo reglamento (Acuerdo 741 de 2019) y por primera vez hay un número muy elevado de jóvenes, más participación de mujeres, así como de bancadas de centro y de izquierda, lo que ha hecho que la dinámica de la política, que es la esencia de la Corporación, sea diferente.
“Tal vez por eso la forma de trabajar se ha notado diferente, tanto en el número de proposiciones de control político, como en el número de proyectos que se han radicado y eso, lógicamente, no escapa al número de comisiones accidentales y de bancadas por temas de interés”, precisó.
Es importante señalar que, a diferencia de las bancadas informales que son espacios más informales de integración, las comisiones accidentales tienen un piso jurídico enmarcado dentro del reglamento interno del Concejo.
Bancadas informales
El jueves de la semana pasada, el concejal del Partido Conservador, Nelson Cubides, coordinó la creación de la bancada “Mejor aire, menos ruido”, hasta la fecha, la última consolidada, en respuesta a la actual crisis que atraviesa la Ciudad, con el propósito de sostener el derecho a tener aire limpio y un ambiente sin ruido para vivir mejor.
Sin dejar de reconocer que las bancadas informales son un ejercicio que convoca a concejales de diferentes bancadas y posiciones ideológicas alrededor de un tema específico, ¿no son un saludo a la bandera si todos los temas, y en especial los más coyunturales de la ciudad, se discuten en las sesiones ordinarias de las tres comisiones del Concejo en sus sesiones y plenarias?
Por una parte, de acuerdo con el concejal Yefer Vega, todos los días el Concejo de Bogotá (330 de 345 días) maneja temas diferentes y agendar un tema para su respectivo debate puede tardar entre ocho días y dos meses. Adicionalmente, la agenda del Gobierno va saturando la labor de control político, “y por eso estas comisiones o bancadas desarrollan temas importantes para algunos concejales que no están dentro de la agenda política o pública”.
Los temas de las bancadas
En este nuevo Concejo, cada partido (a excepción del partido de La U que no tiene la coordinación de ninguna bancada informal) cuenta con mínimo una bancada. Los concejales Diego Cancino (Alianza Verde) y Nelson Cubides (Partido Conservador), son coordinadores de dos bancadas cada uno.
Por lo mismo, el concejal de la Alianza Verde, Martín Rivera, le hizo notar a EL NUEVO SIGLO que actualmente hay 11 bancadas partidistas y se han creado 12 bancadas simbólicas nuevas.
“Eso, de entrada, es una muestra que las mismas corresponden a algo más simbólico, un saludo a la bandera que en muchos casos ha sido un acto con una buena convocatoria mediática. Pero a la fecha, no he visto que estén haciendo o que hayan entregado algo adicional para inaugurar la bancada. Yo tomé la decisión de dejar de asistir porque muy rápido me di cuenta que no tienen nada de fondo”, le dijo Rivera a EL NUEVO SIGLO.
Este año, se han creado las siguientes bancadas informales: ambientalista (Celio Nieves, Polo Democrático); niñez (Jorge Colmenares, Centro Democrático); educación (Nelson Cubides, Partido Conservador); paz (Marisol Gómez, Bogotá para la Gente); cultura (Ati Quigua, Colombia Humana, UP, MAIS); próvida (Marco Acosta, Colombia Justa Libres); mujer (Yefer Vega, Cambio Radical); discapacidad (Andrés Onzaga, Alianza Verde); juventud (Sara Castellanos, Partido Liberal); política de drogas basada en evidencias; cultura ciudadana y política (Diego Cancino, Alianza Verde).
Comisiones accidentales
Punto aparte, las comisiones accidentales, como ya se refirió, tienen unas pautas tanto de conformación como de procedimiento mucho más estrictas (tienen una plaza máxima de siete concejales y una duración máxima de tres meses, termino ante el cual deben presentar un informe sobre el tema que la convocó).
En casos sui generis como el Plan de Ordenamiento Territorial o el Metro, las comisiones accidentales se pueden extender, pero deben hacer reportes trimestrales.
“Un debate como el del Metro se suspende y 15 o 20 días después vuelven a reanudarlo. La comisión accidental sobre Metro, por ejemplo, lo que hace es que puede solicitar información así no haya debate. Y puede que sea un tema que no necesariamente se discuta en sesiones ordinarias porque si los gobiernos son amañados, no van a discutir temas en donde se vea su vulnerabilidad. Pero, si hay una comisión accidental, esta tiene el deber de hacer seguimiento y control, además, como está conformada por concejales, la presión para la entidad va a ser mucho más alta”, añadió el concejal Vega, coordinador de la Comisión accidental sobre la ejecución y a las inversiones de la Primera Línea del Metro de Bogotá.
A este respecto coincidió el concejal Rivera, quien señaló que él ha hecho parte de dos de estas comisiones, “y ambas ya tuvieron un cierre, así como un entregable. Las comisiones accidentales tienen un efecto jurídico y pueden tener una injerencia mucho más importante”.
En lo corrido del 2020 se han conformado 15 comisiones accidentales, transitorias, de vigencia o ad hoc, la primera de las cuales tuvo una duración de 12 días. Esta misma, por ejemplo, fue creada para evaluar las observaciones a las objeciones presentadas por la Administración al Proyecto de Acuerdo 373 de 2019, por medio de la cual se modificaba la escala de remuneración básica salarial y se hacía una nivelación de este valor en los empleos de planta del Concejo.
Otra comisión creada la coordinó la concejala Susana Muhammad, con la intención de analizar el área de protección ambiental El Burrito. Hay una tercera para evaluar el cumplimiento de la Ley 1981 de 2019, por medio de la cual se crea la comisión para la equidad de la mujer en Concejo y Asambleas.
Hay otra sobre Bogotá-Región; el desarrollo social e integral del Distrito; el ordenamiento y gestión del Río Bogotá; el Plan Maestro; el adulto mayor; las nuevas troncales de Transmilenio; el Transmilenio por la carrera 68; el seguimiento al acuerdo 732 de 2018, por medio del cual se adoptan medidas para la promoción y masificación de la movilidad eléctrica.