Así va la recuperación de las coberturas vegetales del Parque Nacional | El Nuevo Siglo
El pasado domingo varias entidades, entre ellas el Ejército Nacional, sembraron 170 árboles en el Parque Nacional.
Foto: Secretaría de Ambiente
Lunes, 6 de Junio de 2022
Redacción Nacional

Desde que se materializó la salida definitiva del grupo de indígenas emberá, que por nueve meses vivió al interior del emblemático Parque Nacional, lo que desató una crisis humanitaria en el corazón de Bogotá, todas las entidades competentes hicieron un trabajo mancomunado para la recuperación de este espacio público, y ya les llegó el turno al Jardín Botánico y al Instituto Distrital de Recreación y Deporte (IDRD).

La recuperación del arbolado y de las zonas verdes tomará alrededor de un mes, pues el impacto ambiental ocasionado por la presencia humana constante de la comunidad indígena alrededor de los mismos fue considerable, pero vale referir que el Distrito, con la colaboración de varias entidades privadas, sembró más árboles de los que se perdieron. Y ¡ojo!, no se perdió ningún árbol de los más antiguos e históricos.

“Desde el mes pasado el Jardín Botánico comenzó a hacer una evaluación de los árboles afectados para evaluar cuántos se perdieron y los primeros que tratamos fueron los árboles adultos, 250 de los cuales fueron fertilizados y podados. Esto significa que se estabilizaron, pues al haber estado presionados por varias fogatas que se hicieron a su alrededor, se vieron afectados”, comenzó por advertir a EL NUEVO SIGLO el subdirector técnico operativo del Jardín Botánico, Germán Darío Álvarez.

120 árboles en reemplazo de 70 perdidos

Dicho eso, ¿qué se perdió y que se sembró?  El Jardín Botánico, explicó Germán Darío Álvarez, estimó la pérdida de 70 árboles. El domingo se plantaron 120 nuevos árboles en el parque “y aspiramos a que en los próximos 30 días tengamos la consolidación de todas las zonas verdes”.

“Por eso le estamos pidiendo a la comunidad que comprenda que el proceso de ocupación del parque, que fue por más de 250 días, tomará alrededor de un mes mientras el pasto prende, mientras los árboles nuevos se adaptan y estaremos haciendo actividades de jardinería, riego y fertilización”, agregó el subdirector Álvarez.

Añadió que de los 70 árboles que se perdieron, la mayoría eran pequeños, que quedaron colindando con las carpas y los cambuches en donde se establecieron los indígenas, y de ahí que el Jardín Botánico los reemplazará con árboles nuevos de alto porte “sembrados para consolidar este pulmón de Bogotá. Hay que recordarles a todos los bogotanos que el Parque Nacional es un pulmón y un patrimonio cultural a nivel nacional y de ahí la importancia de esta recuperación”, precisó.

También las zonas blandas del parque se vienen adecuando con material vegetal resultante de la intervención, para garantizar que el nuevo césped encuentre condiciones aptas para su crecimiento.



60 personas trabajarán durante todo junio

Punto aparte, vale referir que si bien es cierto que la siembra de los 120 nuevos árboles se realizó en el marco de la celebración del Día mundial del medio ambiente, el pasado domingo, actividad de la que participaron miembros de la comunidad, la Secretaría de Ambiente (entre otras entidades del Distrito) y el Ejército Nacional, pasado este mes de recuperación intensiva el Jardín Botánico de Bogotá seguirá acompañando y garantizando tanto su mantenimiento como su protección.  

Es importante señalar que todos los especímenes que se sembraron son árboles nativos tales como cedros, nogales, chicalá, siete cueros y palmas de cera, que aportan a la biodiversidad de Bogotá, y durante todos estos días participarán alrededor de 60 trabajadores del jardín en su protección.

“En este plan de recuperación han intervenido más de 60 personas. Profesionales y técnicos operarios de las colecciones del Jardín Botánico, es decir, gente que sabe manejar la colección, se vino a recuperar el Parque Nacional. Te diría que el patrimonio humano del JBB más fuerte que conoce de coberturas, que es el equipo de colecciones, salió a la calle a hacer esta recuperación de este pulmón de Bogotá y estará todo el mes haciendo actividades de plantación, mientras el IDRD comienza la recuperación de la infraestructura”, agregó el subdirector Álvarez.

Los costos de la recuperación

Con relación a los costos que le está implicando esta recuperación de la capa vegetal al Distrito, el Subdirector dijo que no hay forma de hablar de una única cifra, “pues esta ha sido una suma de esfuerzos. Te pongo un ejemplo: Asosandiego donó 300 metros de pasto, Bavaria 70 árboles y organizaciones comunitarias y sociales hicieron otros aportes”.

Precisó que el Jardín Botánico trajo su propio recurso paro la recuperación del parque, pero este hecho ha sido una suma de esfuerzos, por lo cual calcular un costo con la sumatoria de tanta mano de obra e insumos donados es difícil.

“Es más benéfico para la ciudad hacerlo así porque esto hace que la ciudadanía se apropie. A la ciudadanía le dolió ver el Parque Nacional como quedó y con esta intervención estamos recuperando esta apropiación y cariño por este espacio público”, dijo.

Y no para hacer cuentas alegres, pero “plantar un árbol en Bogotá cuesta 230 mil pesos. No obstante, en este escenario no es tan fácil hacer ese cálculo porque la mano de obra voluntaria nos ha ayudado muchísimo. Ha sido todo más rápido para poder curar las zonas verdes. Pero sí, aquí o en Bosa, en Chapinero, en Usaquén o en Suba, el costo promedio por rendimiento de suministro de tierra, las tareas de ahoyado y el valor del árbol y la tierra nos da ese cálculo en promedio”, concluyó.

Vale referir que de forma paralela a este mantenimiento, explicó el subdirector Álvarez, el Instituto Distrital de Recreación y Deporte hará la recuperación de todo lo que es patrimonial, pues en calidad de administrador del Parque Nacional tiene una póliza que ampara los arreglos de lo que se pudo afectar en términos de infraestructura.

Por último, todo el proceso de recuperación de las coberturas vegetales fue posible después de que, a mediados del mes pasado, la Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos (Uaesp) retirara más de 90 toneladas de residuos tras las labores de limpieza y remoción de escombros, y de que la Secretaría de Salud hiciera el manejo y tratamiento de roedores, mosquitos y zancudos.