Si bien es cierto que buena parte de la mañana y de comienzos de la tarde las manifestaciones se desarrollaron de manera pacífica con muestras de arte, música y baile, las inmediaciones y la Plaza de Bolívar fueron escenario de una jornada relativamente corta de disturbios, vandalismo y agresiones en el centro de la ciudad.
Al cierre de esta edición aún había una tanqueta del Esmad y algunos miembros del Escuadrón Móvil Antidisturbios.
La marcha, que llegó tranquila a la plaza de Bolívar a eso de las cinco de la tarde, se transformó en una jornada violenta que no duró mucho tiempo, pero que al cierre de esta edición dejó a dos personas heridas, al parecer ninguno de gravedad pero uno que de manera inmediata quedó en aparente estado de inconsciencia.
Todo comenzó porque al parecer los manifestantes comenzaron a agredir a la Fuerza Pública, la cual respondió desencadenando el desorden.
Varios civiles tuvieron que pararse entre uniformados y los manifestantes para evitar las agresiones por parte de estos últimos, pero fue inevitable el enfrentamiento. Entre tanto, algunos delincuentes aprovecharon las movilizaciones para asaltar el local de una entidad bancaria en el centro, y cámaras registraron a varios sujetos intentando sacar un televisor del lugar. No obstante, los manifestantes devolvieron el artefacto.
El herido fue atendido por gestores de convivencia y miembros de la Cruz Roja, y la jornada, que duro alrededor de tres horas, y en todo caso cerró con música de tamboras en la Plaza de Bolívar.
“Hoy Bogotá vivió más de 20 concentraciones, protestas y manifestaciones sociales. El 99% de las marchas transcurrieron con tranquilidad. Lamentamos que algunos hechos de violencia protagonizados por unos cuantos vándalos intentaran opacar la jornada”, expresó hacia las nueve de la noche la secretaría Distrital de Seguridad.
Por su parte, la alcaldesa Claudia López coincidió con este porcentaje añadiendo que la marcha fue nutrida en más de 20 puntos de la ciudad, “y solamente en dos sitios tuvo que intervenir el Esmad, y dijo que los gases dispersaron un poco la marcha y la ultima tanda de manifestantes que quiso entrar a la plaza, no pudo hacerlo.
“Yo lamento que la excepción se termine llevando tanta atención. Ojalá dediquemos mas tiempo a ver el 99% de la jornada que transcurrió tranquila. Aún quedan algunos puntos de concentración, sobre todo en Chapinero, y esperamos que todo termine con tranquilidad. El Transmilenio estuvo suspendido una hora pero a las siete de la noche se pudo reestablecer”, puntualizó la alcaldesa.
Por su parte, en el parque de los Hippies en la localidad de Chapinero, 12 bandas de punks, rockeros, metaleros y otras tribus urbanas se reunieron en Chapinero para manifestarse con música de manera pacífica.