EL ALCALDE de Bogotá, Carlos Fernando Galán, recién llega a su puesto y ya se encontró con varios problemas a los que ha tenido que empezar a darles solución. Uno de ellos es la ampliación de la Autopista Norte, esto luego de que se conocería que la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA), archivara la licencia ambiental del proyecto por presuntas deficiencias en los estudios.
Dicho panorama fue analizado por José Stalin Rojas Amaya, director del Observatorio de logística y movilidad de la Universidad Nacional. En entrevista con EL NUEVO SIGLO, el profesor explicó que lo sucedido con la Autonorte, es que la ANLA lo que hizo fue indicar que al proyecto le hacían falta estudios de impacto ambiental para poder seguir con la ampliación, por lo que solicitó se precisara dicha información y así seguir con el proyecto.
“Mediante Auto 4 de enero 2 de 2024, la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA), archiva el trámite de licenciamiento ambiental del Proyecto Accesos Norte Fase II, por deficiencias en el Estudio de Impacto Ambiental (EIA)”, dice el documento compartido por la ANLA.
Precisamente, analizando el documento, Rojas Amaya explicó que: “Lo que hace (la ANLA), es indicar que hacen falta estudios de impacto ambiental, para poder ampliar la Autopista Norte, entonces lo que ha hecho la ANLA es pedir que precisen más algunos estudios de orden ambiental para seguir el trámite de la licencia ambiental”.
Impactos urbanísticos
Por otro lado, el experto indicó que, si bien se sabe que la ampliación de la Autopista Norte va a generar unos impactos ambientales, el tema de fondo no es solamente la ampliación de los accesos del tráfico, si no también, si la construcción va a ser una puerta de entrada a la urbanización o quizás con la conurbación a mediano plazo, esto bajo luz de los predios que están a lado y lado de la Autopista Norte.
Relacionado con lo anterior, la ANLA advierte que el problema radica en la deficiencia de los estudios sobre el impacto ambiental en dos humedales, una contingencia que Rojas asegura no es tan difícil de superar, ya que, la entidad indicó que no cierra las puertas, sino que está señalando una serie de requerimientos que necesita hacer el Distrito para seguir el trámite y posteriormente, otorgar la licencia.
Ana María Llorente, subdirectora de evaluación de la ANLA, habló en medios radiales sobre los principales impactos ambientales del proyecto de la Autopista Norte, declaraciones en las que también le indicó a la Concesionaria que “las puertas están abiertas para que revisemos los detalles técnicos de las obras”.
Frente a dichas palabras, lo que Rojas dijo fue lo siguiente: “Lo que tiene que hacer el Distrito es mirar cada uno de esos requerimientos y hacer estudios para cumplir las exigencias, entonces no se cierra la puerta, sino que, se advierte que faltan unos requisitos técnicos, ambientales y económicos por cumplir o complementar. Lo que dice es: aquí hay líneas rojas que no se deben de pasar”.
Precisamente, dichas acciones que nombra el profesor ya fueron iniciadas por el alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, pues por medio de sus redes sociales lamentó el archivo de la licencia y manifestó que su administración se comprometía a ayudar en todo lo que necesitara la concesionaria para que pudiera obtener la licencia de la ANLA.
“Lamento que se haya archivado el trámite de la licencia ambiental para la obra de la concesión de la autopista Norte desde la calle 191 hasta la 245. Esta es una obra que necesitan millones de habitantes de la ciudad y la región. El gobierno Distrital va a trabajar para que el concesionario cumpla los requisitos de la ANLA y todo lo necesario para una nueva solicitud de la licencia y reducir así el impacto de esta situación en el cronograma de obra”, escribió Galán.
Dilemas del proyecto
La demora en la ejecución del proyecto afecta muchos usuarios que diariamente utilizan dicha vía, afectación que Galán no quiere seguir alargando y que, Rojas Amaya refuerza con el pensamiento de que esas obras se necesitan, pero que también deben generar el menor impacto ambiental posible, pero aún más importante, no ser la puerta para la urbanización.
“Esas obras están propuestas hace dos o tres administraciones, pero esa ampliación tiene que ser con el mínimo impacto ambiental, especialmente en las reservas y no debe abrir la puerta para la urbanización”, resaltó.
En cuanto a las palabras dichas por la exalcaldesa Claudia López: “Presidente eso que usted pensó, pero no hizo, es lo que sí se hace con el contrato acordado entre Bogotá y la nación en 2021 y que ejecuta la ANI para ampliar la autonorte: una combinación técnica de viaducto y box culverts para restablecer la conexión hídrica y ecosistémica de los humedales Torca y Guaymaral que fracturó la construcción de esa vía hace más de 70 años… Deje hacer esa ampliación de la Autonorte. Deje que la ANLA tome decisiones técnicas y no que sea un pasa facturas de sus revanchas políticas”, mismas que fueron tomadas como si el presidente Gustavo Petro fuera un impedimento en la realización de la obra de la autonorte y otras más, Rojas indicó que no cree que lo dicho por el mandatario haga parte de una venganza, pues asegura que la ANLA solo está cumpliendo su función.
“No es ir en contra del Distrito, esto no es tomar una retaliación del Distrito, esto no aparece de un momento a otro, sino que, se está siguiendo un proceso para otorgación de unas licencias ambientales, donde la ANLA está cumpliendo su función, pero no creería yo, en lo personal, que haya un aspecto político o una especie de revanchismo por parte del Gobierno nacional al gobierno Distrital”, dijo director del Observatorio de logística y movilidad de la Universidad Nacional.
Punto de equilibrio
Al hablar de un punto de equilibrio entre el desarrollo sostenible y ambiental y la urgencia de ampliar la malla vial en Bogotá, el experto aseguró que es posible gracias a los estudios de impacto económico, socioeconómico y ambiental que hace la ingeniería, pues precisamente, lo que buscan, es cuidar el medio ambiente. Asimismo, Rojas explicó que en el mundo hay muchos casos de éxito, por lo que reafirmó que es posible realizar este y otros proyectos.
“Sí es posible, lo que hace la ingeniería y los estudios de impacto económico, socioeconómico y ambiental, es justamente ir por esa línea donde el desarrollo se necesita, pero cuidando el medio ambiente. Hay experiencias en varias ciudades que han hecho esos accesos con obras de ingeniería preservando el medio ambiente, entonces sí es posible, pero aquí esa delgada línea está al filo, entre el desarrollo económico ideal que se necesita y la sostenibilidad”, precisó.