Positivo fue el balance que hizo la Administración Distrital sobre las jornadas de protestas que tuvieron lugar el pasado sábado 21 de noviembre en la ciudad de Bogotá.

Estas movilizaciones, convocadas por el Comité de Paro Nacional, estudiantes, docentes y otras organizaciones, iniciaron a las 8 de la mañana y transcurrieron, en su mayoría, de manera pacífica.

El secretario de gobierno, Luis Ernesto Gómez, aseguró que se registraron un total de 23 actividades de protesta entre plantones y marchas en distintos puntos de la capital que, mayoritariamente, fueron de carácter pacífico y simbólico.

Sin embargo, se presentaron dos hechos aislados de alteración del orden público: el primero en la Universidad Nacional donde un grupo de vándalos atacaron una patrulla de Policía, buses y la estación de Transmilenio a la altura de la calle 26 con carrera 30, motivo por el cual fue necesaria la intervención del ESMAD.

En este mismo punto de concentración de la ciudad, también fueron agredidos y golpeados varios jóvenes Gestores de Convivencia de la Alcaldía de Bogotá, quienes pese a su intento de diálogo con los protagonistas de los disturbios tuvieron que abandonar el lugar mientras se dio paso a la intervención y apoyo de la fuerza disponible.

El secretario de Gobierno y la alcaldesa Claudia López lamentaron los hechos vandálicos y alentaron a manifestarse de manera pacífica.

"Una cosa es la protesta pacífica, que valoramos, respetamos y acompañamos con gestores de convivencia. Otra muy distinta es delincuencia vandálica destruyendo con violencia, frente a la cual intervendrá la Fuerza Pública. Los organizadores del paro deben rechazar el vandalismo", dijo la alcaldesa y añadió que es absolutamente inaceptable que vándalos agredan a los servidores públicos de Bogotá.

“No permitiremos que vándalos infiltren y deslegitimen la protesta ciudadana pacífica. Los enfrentaremos con fuerza pública y judicialización”, finalizó López.

Respecto al segundo hecho de alteración del orden público, este tuvo lugar en el norte de la ciudad, por el sector de la calle 72, en donde otro grupo de personas encapuchadas destruyeron un cajero automático. 

El secretario de Gobierno concluyó que la Policía de Bogotá inició investigaciones correspondientes y se ha judicializado a una de las personas involucradas en los hechos violentos durante la jornada de protestas en la capital colombiana.