Alcanzar una mayor articulación entre la Fiscalía, la Unidad de Información y Análisis Financiero (UIAF) y la Sociedad de Activos Especiales (SAE), pidió ayer el presidente Iván Duque para agilizar los procesos de extinción de dominio a recursos derivados del narcotráfico y lavado de activos.
Incluso dijo que se tiene que trabajar para que estos procedimientos sean exprés, y señaló que espera que el entrante fiscal general Francisco Barbosa pueda dar pasos en este propósito.
Duque Márquez aseguró que la lucha contra el lavado de activos “tiene que ser, cada vez más, articulada entre las agencias” y añadió que “tenemos que trabajar de la mano para que eso sea ‘exprés’ porque en la medida en que nosotros podamos extinguir de dominio rápidamente los bienes del narcotráfico, de la corrupción y del crimen, yo creo que nosotros nos fortalecemos institucionalmente”.
El jefe de Estado explicó que la articulación se debe dar “por un lado, la Unidad de Información y Análisis Financiero (UIAF), ser cada vez más acuciosa, más eficaz en la inteligencia financiera para detectar” y, por el otro, “la Fiscalía, para acompañar esos procesos que develan y que nos permita a nosotros desmantelar esas redes”.
Otro elemento que trajo a colación fue el papel de la Sociedad de Activos Especiales, de la que, dijo, debe tener “la capacidad de asumir esos activos y monetizarlos rápidamente en beneficio del país”.
Al referirse a los retos que existen en esta lucha y que se han caracterizado históricamente en el país, el mandatario aseguró que el primero es “la capacidad de monetizar rápidamente; ahí hemos tenido procesos que son muy largos por las mismas marañas litigiosas”, por lo que insistió en que “ahí tenemos que trabajar de la mano para que eso sea ‘exprés”.
Aclaró que lograr esa extinción de dominio de forma rápida requiere que se haga “en un marco de transparencia absoluta y de información probatoria a prueba de cualquier crítica”.
Duque añadió que “entonces, yo espero con el fiscal Barbosa, con la UIAF, con la Sociedad Activos Especiales trabajar muy de la mano y que esta sea una herramienta cada vez más notoria y más contundente frente la criminalidad”.
La extinción de dominio es un mecanismo mediante el cual el Estado puede perseguir los bienes de origen o destinación ilícita, a través de una vía judicial que tiene como finalidad declarar la pérdida del derecho de propiedad de dichos recursos. Su importancia radica en que es un instrumento esencial para la ejecución de las estrategias contra el crimen organizado, ya que cumple un papel fundamental en la desarticulación de organizaciones y redes criminales, además de detener los efectos que genera el flujo de recursos ilícitos en la sociedad.
La figura de la extinción de dominio en Colombia se usó por primera vez para perseguir los bienes del narcotráfico y en ese sentido se ha utilizado en las últimas tres décadas.
No obstante, en los últimos años este mecanismo se ha extendido a otros delitos de gran impacto para la ciudadanía como el robo de celulares y el proxenetismo. Producto de ello la Fiscalía ha ocupado cientos de locales en diferentes ciudades en donde vendían móviles robados así como casas y apartamentos en donde se presentaba explotación sexual de menores de edad. También se han extinguido locales comerciales por contrabando y adulteración de licores.