A pesar de los esfuerzos de las autoridades, la violencia no da tregua en diferentes regiones del país, pues en las últimas horas se registraron tres hechos aislados que cobraron la vida de nueve personas.
En el corregimiento Bijagual, municipio de Nechí, Bajo Cauca antioqueño, cuatro hombres y una mujer fueron asesinados cuando departían dentro de un establecimiento comercial.
El alcalde de Nechí, Marcos Javier Madera Camero, dijo que aún no se tienen mayores detalles de los móviles del múltiple crimen.
Las víctimas fueron identificadas como Orlando David Pérez Arcia, José Gabriel Castro Mestra, Robinson Rafael Arrieta Vergara, Yidis Paola Avilés Pérez y Gregorio Bolívar Arévalo.
Por su parte, el general Juan Carlos Ramírez, comandante de la Séptima División del Ejército, afirmó que en la zona operan el ‘Clan del Golfo’, el Eln, las ‘Autodefensas Gaitanistas’ y ‘los Caparros’, grupos armados ilegales que se disputan las rutas del narcotráfico.
Mientras tanto, en la región de El Patía, en el departamento del Cauca, los pobladores denunciaron el hallazgo de tres cuerpos sin vida abandonados en la vía que comunica al municipio de El Bordo.
Dos de las víctimas fueron identificadas como Alex Javier Hoyos Uribe y Ronal Bernardelli Riascos Ortiz. Ambos eran empleados de un lavadero de automóviles.
Al parecer, según el alcalde de El Patía, Orlando Muñoz, las víctimas habían sido objeto de amenazas.
Por otro lado, las autoridades de Norte de Santander ofrecieron $20 millones de recompensa por información que permita identificar a los autores del crimen del líder social de Ocaña, Jorge Solano Vega.
El dirigente comunal fue acribillado en su casa del barrio Miraflores de Ocaña, a pesar de que contaba con un esquema de la Unidad Nacional de Protección, pero habría despachado a sus escoltas en el momento del atentado.
De acuerdo con las autoridades, hombres armados lo abordaron y le dispararon en repetidas ocasiones causándole la muerte de forma inmediata.
- En contexto: Asesinado en Ocaña líder social Jorge Luis Solano
Solano se hizo visible ante la opinión pública por sus constantes críticas a entidades gubernamentales y reclamos por presunta corrupción, lo que le originó, según sus propias denuncias, amenazas contra su vida.
El crimen de Solano Vega se suma otros 10 asesinatos ocurridos en Norte de Santander contra líderes sociales y defensores de derechos humanos en lo corrido de este año, de acuerdo con un informe de la Fundación Indepaz.