La aviación israelí proseguía su ofensiva aérea este viernes, cuarto día de su pulso con el movimiento palestino Hamas, sin lograr poner fin a los lanzamientos de cohetes desde Gaza, pese al llamamiento de la comunidad internacional, inquieta, a un alto el fuego rápido.
Dos nuevos bombardeos aéreos dejaron seis muertos, incluyendo una mujer, la mañana del viernes en la franja de Gaza, indicaron fuentes médicas.
En conversación telefónica con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, el presidente estadounidense, Barack Obama, "expresó su temor de una escalada y subrayó la necesidad de que todas las partes hagan lo posible para proteger a los civiles y restaurar la calma", indicó la Casa Blanca en un comunicado.
"Estados Unidos sigue dispuesto a facilitar un cese de las hostilidades, incluida una vuelta al acuerdo de cese del fuego de noviembre de 2012", precisó la nota.
En plena escalada de la violencia, que el jueves dejó más de 30 palestinos muertos, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon llamó a un alto el fuego inmediato en la apertura de una reunión de urgencia del Consejo de Seguridad.
"Es más urgente que nunca intentar encontrar un terreno de consenso para lograr un retorno a la calma y a un acuerdo de cese el fuego", declaró Ban. El jefe de la ONU reiteró además "su llamado a ambas partes a mostrar la máxima moderación".
El presidente francés, François Hollande, expresó su inquietud por teléfono al presidente palestino Mahmud Abas y estimó que "la escalada debe cesar".
El primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, declaró que las relaciones con Israel no volverán a la normal hasta que no cese la ofensiva israelí.
Más de 30 palestinos murieron el jueves en Gaza en los bombardeos de la aviación israelí. En total, los operativos de la aviación israelí han causado más de 90 muertos y 500 heridos en cuatro días.
Hamas y la Yihad Islámica han lanzado el jueves más de 180 cohetes contra el territorio israelí, que no han dejado víctimas aunque sí decenas de personas traumatizadas.
Las sirenas resonaron, por segunda vez en dos días en Jerusalén, a 80 km de Gaza, y se oyeron una serie de explosiones en la ciudad.
Dos cohetes cayeron en campo abierto en la Cisjordania ocupada, uno cerca del asentamiento de Maaleh Adumim y el otro cerca de Ofer, una cárcel militar israelí al este de Ramala, sin causar daños ni heridos, según testigos y fuentes de seguridad.
El sistema antimisiles "Cúpula de Hierro" (Iron Dome) interceptó otros dos cohetes. Tel Aviv, la capital económica, sufrió ataques similares a primeras horas del jueves.
Esta nueva espiral de violencia es la más mortífera desde la operación Pilar de Defensa en noviembre de 2012, con similar objetivo de detener los lanzamientos de cohetes desde Gaza.
Empezó con el secuestro el 12 de junio y posterior asesinato de tres estudiantes israelíes en Cisjordania, atribuido por Israel a Hamas, seguido del asesinato de un joven palestino quemado vivo en Jerusalén por ultraderechistas judíos.
- Los niños expuestos -
Desoyendo los llamamientos internacionales, Netanyahu ha descartado un alto el fuego, según Haaretz. "No está a la orden del día", declaró el primer ministro, citado por el diario.
"Los resultados de 'Tsahal' (ejército) son por ahora significativos y vamos a seguir atacando a Hamas y a las otras organizaciones terroristas", prometió el ministro de Defensa, Moshé Yaalon.
La aviación israelí bombardeó el jueves 110 "blancos terroristas" en la franja de Gaza -controlada desde 2007 por Hamas- con un total de 860 operativos aéreos desde el inicio de la operación "Protective Edge" (Barrera Protectora), el lunes a medianoche.
La noche del miércoles al jueves, un misil mató en Gaza a nueve palestinos que seguían la semifinal del Mundial entre Argentina y Holanda en un café cerca de Jan Yunes (sur), según los servicios de emergencias.
En la misma localidad, cuatro mujeres y cuatro niños perecieron en el bombardeo de dos casas. Un quinto menor murió en un ataque aéreo en el norte del territorio.
Para atender a los heridos de Gaza, Egipto abrió el paso fronterizo de Rafah, y puso en alerta a los hospitales de la zona, según la agencia oficial egipcia Mena.
Según la ONG DCI-Palestina, que se dedica a la defensa de los niños, 14 menores perdieron la vida el martes y miércoles en Gaza.
En un comunicado, la UNICEF advirtió de "los sufrimientos devastadores" infligidos a los niños de ambas partes.
Por su parte, el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) instó a todas las partes a "proteger a los civiles y al personal médico atrapados en la espiral de la violencia".
- Escalada -
Sin embargo, la operación aérea, que vació las calles de Gaza, no ha conseguido acabar con los ataques de Hamas y la Yihad Islámica, equipados ambos con cohetes de largo alcance, como el M75 de fabricación local, cada vez más precisos.
Según el Ejército israelí, 184 cohetes fueron lanzados el jueves desde Gaza, 44 de ellos interceptados por el dispositivo antimisiles Iron Dome. Más de 500 proyectiles han sido lanzados contra territorio israelí desde el inicio de las hostilidades, un centenar largo interceptados, según Tsahal.
Hamas ha reivindicado lanzamientos de cohetes contra Jerusalén y Tel Aviv, también contra Haifa, a 160 km al norte, y el centro nuclear de Dimona, al sur.
Según Firas Abi Ali, experto del instituto IHS Country Risk, Hamas está "sumido en una escalada que pretende conducir a Israel a una ofensiva terrestre".
"Seguimos confrontados a una campaña difícil y compleja", admitió Netanyahu al término de una reunión de su gabinete de seguridad. Ante la perspectiva de una ofensiva terrestre en Gaza, fueron convocados 40.000 reservistas.
Los palestinos y los países de la Organización de la Cooperación Islámica (OCI) exhortaron a las Naciones Unidas a "detener la agresión israelí".
En el plano humanitario, Egipto abrió el paso de Rafah para recibir a los palestinos heridos en la ofensiva israelí.