El veterano atacante brasileño Rivaldo aseguró que el Mundial-2014 que organiza su país será una "vergüenza" y condenó las millonarias inversiones públicas para albergar el torneo, después de que jugara nuevamente, a sus 41 años, con el club Mogi Mirim, que también preside.

"Dije en otras oportunidades que Brasil no tiene condiciones para hacer una Copa del Mundo (...) Va a ser difícil, Brasil pasará vergüenza", lanzó en una entrevista con la radio Jovem Pan de Sao Paulo la noche del miércoles.

Rivaldo, campeón del mundo con Brasil en 2002, denunció el riesgo de que muchos de los estadios mundialistas terminen convertidos en "elefantes blancos" después de la competencia.

"Sabemos que Brasil tiene muchas otras prioridades. Tenemos colegios, hospitales y cárceles que necesitan ser construidos mucho antes que estadios. No necesitamos invertir tanto dinero para un evento de apenas un mes", siguió el legendario jugador, que volvió a las canchas en la noche del miércoles con el club Mogi Mirim, que está en la tercera división brasileña.

Las manifestaciones

Rivaldo es uno de los jugadores locales más críticos con el Mundial junto al exastro Romario, hoy diputado federal.

La exestrella apoyó las manifestaciones que llevaron a la calle, en plena Copa Confederaciones, a más de un millón de personas para exigir mejor calidad en salud o educación pública, menos corrupción en la arena política, además de criticar los enormes gastos para el Mundial.

El futbolista recordó entonces como su padre murió por no ser atendido a tiempo en un hospital público de Recife (noreste).

Nuevas protestas fueron convocadas para este sábado en las 12 ciudades sedes del Mundial bajo el lema "No habrá Copa", justo después de que el secretario general de la FIFA, Jerome Valcke, alertara que Curitiba corre riesgo de quedar fuera del torneo por los atrasos en el estadio.

De su lado, el presidente de la FIFA, Joseph Blatter, llegó a afirmar a principios de enero que Brasil es el país "con más retraso" en los preparativos desde que él está en la organización de las Copas del Mundo.

Sin embargo, Rivaldo puso, por otro lado, a la selección brasileña de Luiz Felipe Scolari, con quien fue campeón mundial en 2002, entre las favoritas a ganar el torneo, según la radio Jovem Pan.

En la tercera división

En su regreso a los gramados, el atacante entró como titular y fue sustituido en el minuto 62 del partido, que el Mogi Mirim perdió en la noche del miércoles ante el Sao Paulo (4-0), cuyo portero y capitán, Rogerio Ceni, también tiene 41 años.

El encuentro donde reapareció Rivaldo se disputó por la segunda fecha del Campeonato del estado de Sao Paulo, cuando muchos veían peligrar la carrera del exjugador del FC Barcelona.

El Mogi Mirim, fundado en 1932, actualmente juega en la tercera división del fútbol brasileño.

A principios de enero, Rivaldo dijo en el sitio web del club del interior del estado de Sao Paulo: "Todavía no he confirmado nada. Hoy estoy más para no jugar que para jugar. Puede decirse que Rivaldo no tiene seguridad si va a jugar con el Mogi". Pero lo hizo.

El campeón mundial en 2002 arrastraba una lesión en la rodilla, que sufrió en un entrenamiento la temporada pasada en el Sao Caetano. Pese a ello, el club asegura que se mantenía en buena forma física, mientras armaba el equipo para disputar el campeonato paulista.

De forma insólita, el exfutbolista del FC Barcelona (1997-2002) y el AC Milan (2002-2004) milita actualmente en el mismo grupo de jugadores que su hijo, Rivaldo Júnior (18), quien, sin embargo, no formó parte de la alineación para el partido del miércoles.