Desde las primeras semanas del año, la alcaldía de Enrique Peñalosa ha venido implementando acciones para tener vías más seguras y reducir los siniestros viales. A la fecha son 88 puntos clave distribuidos en la ciudad los que han recibido intervenciones de ingeniería que van desde la recuperación de la malla vial hasta cierres entre separadores para mejorar la movilidad segura de peatones, ciclistas, motociclistas y conductores, reducir las congestiones y mejorar la movilidad.
Así, en los 88 puntos clave, 30% de las intervenciones contemplaron medidas de pacificación del tránsito, 17% crearon nuevas intersecciones seguras, 15% permitieron recuperar la malla vial, 12% incluyeron medidas de iluminación, recuperación de bocacalles, limpieza y reconstrucción de sumideros, cambio de tapas de alcantarillas y cajas de inspección, 10% incluyeron la instalación de semáforos con dispositivos sonoros y 16% desarrollaron otras medidas.
Los equipos de la entidad han implementado reductores de velocidad, han pintado zonas escolares y senderos peatonales, han puesto señales para que los vehículos circulen de manera ordenada en las intersecciones, entre otras soluciones.
En los primeros 100 días, por ejemplo, la Secretaría de Movilidad cerró el separador de la Avenida Circunvalar con calle 39, un punto en el que ocurrían choques constantemente. En Kennedy, en la intersección de la calle 40C Sur con carrera 72M Bis A, había un problema crítico con conductores que no respetaban las señales de “No Pase” y “Giro Prohibido”, ubicadas en el separador. Así que en mayo la Secretaría decidió cerrar el separador y demarcar líneas reductoras de velocidad y de la calzada en el acceso sur.
En Chapinero, se permitió desde abril el giro izquierdo para acceder al norte desde la Diagonal 61 tomando la Carrera 17, y se modificó la operación de los semáforos. De esta manera se atacó este punto que registró 15 siniestros viales en 2015 y otros siete entre enero y marzo de 2016.
En esta misma localidad fue atendida la intersección de la carrera 8ª con Calle 47, donde en promedio se registraba un choque cada dos semanas, y en el transcurso de 15 meses hubo 12 personas lesionadas, además de pérdidas materiales y la sensación de desprotección de la comunidad. Allí, la Secretaría de Movilidad implementó una medida de tráfico calmado que obliga a los conductores a reducir la velocidad de sus vehículos con canalizaciones que garantizan que estos transiten ordenadamente por el carril central de la intersección. Adicionalmente, se instalaron reductores de velocidad que restringen aceleraciones bruscas, y se redujeron las calzadas limitando el ingreso de más de dos vehículos por la Calle 47 y de más de uno por la Carrera 8ª.
Estas acciones en diferentes puntos de la ciudad han sido importantes para mitigar la tendencia de aumento de víctimas fatales que se registró en los primeros meses del año. Así, para abril y mayo se evidenció una reducción del 20% y 17%, respectivamente, de muertes por siniestros viales en Bogotá, con respecto a los mismos meses de 2015. También hubo una disminución en el número de lesionados, pues en los primeros cinco meses de este año Bogotá registró 396 lesionados menos que en 2015 y 349 menos que en 2014. En ambos casos esto representó una reducción del 6%.
En general, durante los primeros cinco meses de 2016 las víctimas totales (tanto fatales como lesionadas) disminuyeron en 379 personas con respecto al mismo período de 2015, es decir, un 6% menos. La reducción también se observa al comparar con el año 2014, con una disminución de 367 víctimas. Así, la ciudad pasó de tener 6.322 víctimas entre enero y mayo de 2014 y 6.334 en el mismo periodo de 2015, a 5.955 víctimas en los primeros cinco meses de 2016.
“Estamos interviniendo puntos concretos en toda la ciudad con diversas medidas que contribuyan a salvar vidas”, dijo el secretario de Movilidad, Juan Pablo Bocarejo.
A estas intervenciones se suman las acciones de la Policía de Tránsito en vía con el aumento en los controles de alcoholemia, y en el respeto a la normatividad y a las señales de tránsito, cuya transgresión ocasiona riesgos en la seguridad vial y para la vida de los diferentes actores de la vía.