En firme quedó la muerte política del exconsejal Carlos Arturo Romero por decisión de la Corte Constitucional ratificando así la decisión que había tomado el Consejo de Estado, tras la demanda en su contra por no haberse posicionado en los tres días reglamentarios en la fecha de instalación del cabildeo Distrital cuando fue elegido en el 2008.
El Alto Tribunal no consideró que existiera en la decisión del Consejo una violación al debido proceso que siguió el caso del exconcejal y esposo de la actual candidata a la alcaldía de Bogotá, Clara López.
En el recurso que interpuso Carlos Romero ante la Corte alegó que no pudo posesionarse para no perjudicar a su esposa, Clara López, que para la época iba a asumir como alta funcionaria en la Alcaldía de Bogotá, durante el periodo de Samuel Moreno, condenado por el ‘carrusel’ de la contratación en Bogotá.