Luego de asegurar que E.U está determinado a destruir todas las redes terroristas, Barack Obama confirmó la muerte del imán radical Anwar al Aulaqi en Yemen.
Aulaqi "estaba en el origen de la tentativa fallida de hacer explotar un avión de pasajeros en Navidad de 2009.
También fue el responsable del intento de hacer explotar unos aviones cargo estadounidenses", subrayó Obama.
Esta muerte "marca una nueva etapa importante en el esfuerzo global emprendido para vencer a Al Qaida y sus ramificaciones", añadió el presidente de Estados Unidos, al tiempo que destacó que "Al Qaida en la península arábica sigue siendo una organización peligrosa", aunque esté "debilitada".
"En el futuro, seguiremos atentos a las amenazas que se dirijan contra Estados Unidos, alguno de nuestros aliados o socios. Pero que quede claro, (la muerte de Aulaqi) muestra que Al Qaida y sus ramificaciones no estarán a salvo en ninguna parte del mundo", prometió Obama.
"Trabajando en conjunto con Yemen, así como con otros aliados y socios, seguiremos determinados, sin debilidad, resueltos, obstinados en nuestro compromiso de destruir las redes terroristas que quieren asesinar a estadounidenses", concluyó el presidente.
Obama habló en la base militar de Fort Myer, al suroeste de Washington, donde asistió al traspaso de poder entre el almirante Michael Mullen y el general Martin Dempsey en el puesto de jefe del Estado Mayor Conjunto, el principal consejero militar.
Aulaqi fue abatido este viernes en un supuesto ataque aéreo estadounidense en Yemen. El ministro de Defensa del país árabe, que fue el encargado de anunciar su muerte, aseguró que el paquistaní-estadounidense Samir Khan, editor de la reviste de Al Qaida en inglés Inspire, falleció igualmente en el mismo ataque aéreo.
AFP