El jefe del gobierno italiano, Mario Monti, llegó este miércoles a Helsinki para tratar de limar diferencias con el ejecutivo finlandés sobre las soluciones para salir de la crisis de la deuda en la zona euro.
El primer ministro finlandés, Jyrki Katainen, recibió a Monti en su residencia hacia las 13H45 (10H45 GMT), constató una corresponsal de la AFP.
Ambos mandatarios tienen previsto ofrecer una conferencia de prensa.
El jefe del gobierno italiano se iba a reunir posteriormente con el presidente del Parlamento, Eero Heinäluoma, y cenará con el presidente finlandés, Sauli Niinistö, antes de participar en un debate el jueves por la mañana sobre "Un futuro común para Europa".
El martes por la noche, Monti se reunió en París con el presidente francés, François Hollande, y el jueves por la tarde tiene previsto viajar a Madrid para hablar con su homólogo español, Mariano Rajoy.
Entre estas visitas a los dos grandes socios latinos, con los que Italia tiene una gran sintonía para salir de la crisis de la deuda, Finlandia es una etapa más delicada.
El miércoles Monti preparó el terreno y pidió a sus socios europeos "un espacio para respirar", en declaraciones al periódico finlandés de referencia, Helsingin Sonomat.
"Italia no parece necesitar por el momento una ayuda especial, en particular para salvar toda su economía", subrayó.
A principios de julio la ministra de Finanzas finlandesa, Jutta Urpilainen, dijo que no está preparada para asumir "la responsabilidad colectiva ante las deudas (...) y el riesgo de otros países".
Dos días más tarde Monti tildó de "inapropiadas" las declaraciones de autoridades nórdicas que "pretenden o en cualquier caso tienen el efecto de reducir la credibilidad de lo que el Consejo Europeo ha establecido por unanimidad".
Helsinki es reticente a recurrir a los fondos de rescate comunes de la zona euro para reducir las tensiones en los mercados de la deuda de los países que han adoptado medidas en materia presupuestaria, pero que a pesar de ello siguen teniendo dificultades para financiarse a costes razonables.
Es el caso de Italia, que a pesar de un déficit previsto en 2012 de sólo 2% de su Producto Interior Bruto, tiene una deuda elevada que supera el 120% PIB.
En el mercado de deuda, las tasas de interés que pagan por ejemplo Alemania e Italia batieron nuevos mínimos este miércoles, mientras que España o Italia seguían financiándose a precios muy altos, un signo de las disparidades en la confianza que otorgan los inversores a los distintos países de la zona.
Alemania captó 3.350 millones de euros en una emisión de bonos a cinco años con una tasa media récord de 0,31%, mientras que las tasas del bono a 10 años francés fueron sólo de 2,010% en el mercado secundario, donde se negocia la deuda ya emitida.
En cambio, el mercado secundario le exige a España tipos de interés del 6,67% y a Italia, cercanos al 6%.