Nuevamente se agita en el país la idea de que el deporte por fin tenga un ministerio con el objeto de dar una respuesta directa y de más alto nivel en aras de su mayor desarrollo a nivel competitivo así como de promover un espacio fundamental para la salud física y mental de la población, como es la recreación. Sin embargo, como antes ha sucedido, son más las voces que consideran que este tipo de estructura no es la mejor idea.

La semana anterior se perdió para Medellín la posibilidad de organizar los próximos Juegos Olímpicos de la Juventud, pues ganó la propuesta que presentó Buenos Aires (Argentina) ante la dirigencia internacional del deporte.

La consecución de esta sede se convirtió en propósito nacional, pues el propio presidente Santos acompañó a Lausana (Suiza) a la delegación de la capital antioqueña, encabezada por el alcalde de Medellín, Aníbal Gaviria, a la ceremonia en que el Comité Olímpico Internacional reveló la decisión sobre la sede de esta olimpiada en 2018 a la cual además de Medellín y Buenos Aires, también aspiraba Glasgow (Escocia).

A propósito de este hecho desafortunado para el deporte colombiano por lo que hubiera significado el hecho que la sede de estos juegos hubiera recaído en Medellín en materia de construcción y modernización de escenarios así como de una óptima preparación de nuestros deportistas, sin dejar de lado la gran ‘vitrina’ internacional que hubiera logrado la capital paisa, el senador Manuel Virgüez (Movimiento MIRA) dijo que es una oportunidad para replantear la política pública del deporte en Colombia y en ese camino considerar la posibilidad de la creación de un ministerio del deporte.

Si bien es cierto, el gobierno del presidente Santos ha intentado elevar la importancia del deporte dentro del Estado colombiano, este esfuerzo no es suficiente, consideró el Parlamentario. “La ilusión que todos los colombianos sentimos por la posibilidad de que Medellín fuera la sede de unos juegos olímpicos, no terminó como esperábamos, porque Argentina pudo ofrecer mejor infraestructura construida, medios de transportes coordinados y muchos años de estar luchando por una sede”, afirmó Virgüez.

 

El viaje de la delegación colombiana en cabeza del presidente Santos y de nuestros medallistas olímpicos, que hicieron una muy buena presentación, no logró ocultar las dificultades que afronta el deporte en Colombia. Ni siquiera, el empuje de Medellín, que se ha convertido en un referente para otras ciudades del país, tiene el desarrollo deportivo de otras urbes del continente señaló el Congresista de MIRA.

Sí la práctica de deportes convencionales adolece de estímulos, escenarios e incentivos para los deportistas, los deportes extremos y las nuevas tendencias deportivas se encuentran discriminados por la sociedad y por el Estado, que no invierte recursos, en la mayoría de ellos, por no estar considerados como deportes olímpicos.

Por eso Virgüez planteó que “necesitamos una política fuerte del Estado colombiano para patrocinar masivamente a los deportistas, que en la mayoría de las veces tienen que forjarse de manera individual y con esfuerzos familiares. El deporte debe ser asumido como una estrategia para consolidar la convivencia y disminuir la agresividad que presentan muchos jóvenes. Necesitamos un Ministerio del Deporte que articule y fortalezca la política.

La ciudad de Buenos Aires ofreció el aprovechamiento integral de las 26 sedes deportivas existentes de la ciudad, además de los estadios de Boca y River, el Centro Nacional de Alto Rendimiento y la construcción de una Villa Olímpica con dineros de la ciudad. De igual forma, Argentina fue una de las 13 naciones fundadoras del Comité Olímpico Internacional, y una de las pocas que no había sido distinguida con la organización de un evento olímpico, a pesar de sus 5 postulaciones fallidas.

“Es decir, que a pesar del esfuerzo realizado por la delegación colombiana para obtener la sede, Argentina ha desarrollado instalaciones, presupuestos y una historia en los organismos internacionales del deporte que Colombia apenas inicia. Llegó el momento en que entendamos, que la inversión que se realice para el deporte, es una inversión para la paz”, finalizó el senador Virgüez.

 

No se ‘casan’ con la idea

 

El año anterior la participación de la delegación colombiana en los Juegos Olímpicos de Londres (Reino Unido) se constituyó en la mejor de la historia de nuestro país en este magno evento, con 8 medallas: un oro, tres platas y cuatro bronces.

En esa oportunidad tomó fuerza nuevamente la idea de un ministerio del deporte, pues si tras anteriores olimpiadas se trajo a colación por los pobres resultados, tras Londres se dijo que podríamos ser aún mejores y hacer más por la actividad en materia de inversión.

Sin embargo, por esos días en el Congreso la idea de crear una cartera para el deporte no causó mayor impacto, aunque varios parlamentarios coincidieron en que es necesario apoyar más esta actividad.

Por esos días el senador Luis Carlos Avellaneda dijo que “es indudable que nosotros no le estamos dando la importancia que debe tener el deporte para muchas cosas. Uno: para la salud de la población que debe estar incluida en las líneas de prevención de enfermedades, en la salud mental y en la prevención del delito”, expresó Avellaneda, para quien se hace inevitable que se requieren más recursos. Mientras que el senador Juan Lozano dijo por esos días que “independientemente de que sea un Ministerio, un Viceministerio o un Instituto, lo que es claro es que el deporte colombiano requiere más inversión”, indicó.

Mientras que el senador Édgar Espíndola manifestó que se requiere con urgencia una verdadera política del deporte. “Creo que el compromiso del Gobierno Nacional debe girar en torno a darle más recursos económicos a los ciudadanos para que puedan practicar sus actividades deportivas. Hoy es triste decir que los deportistas cuando van a entrenar deben pagar el alquiler de las canchas y de esta manera no se va a ninguna parte”, anotó.

Y es que históricamente hasta ahora el Congreso no le ha jalado a la idea de un ministerio del deporte, como lo ha mostrado hundiendo varios proyectos de ley en este sentido.

En el año 1998 el entonces senador Édgar Perea radicó un proyecto para la creación de esta cartera, sin embargo, la iniciativa fue archivada por falta de trámite. Luego en el año 2003, el representante a la Cámara por Antioquia, Carlos Alberto Zuluaga presentó un proyecto para que el Ministerio de Cultura se constituyera en el Ministerio de Cultura y del Deporte. Este proyecto fue hundido en segundo debate.

La más reciente de estas iniciativas fue radicada hace tres años por parte de varios senadores, entre ellos, Hemel Hurtado, Antonio Correa y Mauricio Aguilar, el cual fue archivado sin recibir debate.

 

 

Coldeportes en Consejo de Ministros

Tras la brillante actuación colombiana en los Olímpicos de Londres el año anterior, el presidente Santos descartó que su gobierno estuviera contemplando la posibilidad de crear un ministerio del deporte.

El Mandatario justificó por esos días la decisión señalando que con una reforma a Coldeportes se le elevó el estatus de departamento administrativo. “Va a participar en el Consejo de Ministros el Director de Coldeportes, porque hay que recordar que ya le hicimos una reforma para elevarle de estatus a Coldeportes. Con la reforma anterior volvimos a Coldeportes casi como un ministerio”, explicó Santos.

La Ley 1444 de 2011 le dio facultades extraordinarias al presidente Santos para escindir unos ministerios y modificar la estructura administrativa de algunas entidades del Estado, entre ellas Coldeportes.

Una de las consecuencias de que Coldeportes pasara de instituto a departamento administrativo del deporte es que la planta de personal pasó de 88 a 180 personas.

 

 

Países del área con Ministerio del Deporte

. Brasil

. Uruguay

. Venezuela

. Ecuador

. Bolivia

 

 

Campeona olímpica

La primera medallista de oro de Colombia, María Isabel Urrutia, en los Juegos Olímpicos de Sídney 2000 consideró que antes que un ministerio, el deporte nacional requiere apoyo y organización, el cual cuenta, dijo, con una estructura organizacional adecuada.

En ese sentido destacó el paso de Coldeportes a Departamento Administrativo porque “tiene toda la autonomía necesaria, acabó con la junta directiva de Coldeportes, que se juntaban unos poquitos a definir qué se hacía en el deporte”. En el mismo camino indicó que no hay necesidad de un ministerio cuando Coldeportes es departamento administrativo y el director “tiene asiento en la junta de ministros”.

Urrutia, quien también fue representante a la Cámara, dijo que  más que organización, se requiere “crear unas políticas claras del deporte en Colombia. El desarrollo del deporte se ha venido dando, mal o bien tiene recursos económicos. Si creo un ministerio seguramente voy a tener más burocracia y voy a gastar más plata en administración. Aquí lo que hay que hacer es una reestructuración de cómo se invierten los recursos, porque hoy sigue teniendo la misma característica: 70% para administración e infraestructura y solamente 30% para el fomento del deporte y la recreación”.

Urrutia también ve la necesidad de que el deporte colombiano se vuelva a centralizar para darle unas políticas más claras a los departamentos y municipios para que inviertan los recursos de manera adecuada.

 

 

COC

El presidente del Comité Olímpico Colombiano, Baltazar Medina, dijo que el talón de Aquiles de la actividad está en los recursos para su desarrollo. “He sido siempre de la idea que lo que el deporte colombiano necesita no es un ministerio sino una adecuada financiación y un manejo técnico adecuado. O sea que el manejo del deporte esté en manos de personas conocedoras del deporte y en ese orden de ideas, un ministerio simplemente por crear un ministerio no resolvería nada. Si detrás de un ministerio vienen las posibilidades de que el deporte tenga un mayor presupuesto, bienvenido, pero diría que la estructura actual con Coldeportes ya se ha convertido en un departamento administrativo adscrito a la Presidencia de la República y con una adecuada financiación el país podría atender perfectamente todas las necesidades de los distintos sectores de la comunidad en materia deportiva, de recreación y aprovechamiento del tiempo libre.