Mediante las nuevas normas expedidas por el Gobierno y el Congreso para favorecer a los trabajadores colombianos, este año cerca de un millón de personas podrán beneficiarse del subsidio familiar con lo que se llegaría a 3.289.899 que pueden recibir la atención.
La mayor parte de empleados que entrarán al sistema, trabajan en el servicio doméstico, madres comunitarias y madres sustitutas, al Sistema del Subsidio Familiar, que a partir de su afiliación se podrán beneficiar de los subsidios, servicios y programas que ofrecen las cajas de compensación.
Indica la Asociación de Cajas de Compensación Familiar, Asocajas, que “adicional a esta población están 1.461.058 pensionados, que podrán acceder al Subsidio Familiar”.
De esta población, 853.289 pensionados, cuya mesada sea de 884 mil pesos o menos, que según el proyecto de ley que está para sanción presidencial, podrán acceder a los servicios de cultura, recreación y deporte que ofrecen las Cajas de Compensación Familiar, con beneficios preferenciales. Hoy por hoy, solamente 35.198 pensionados acceden a los beneficios de las Cajas.
Indica el gremio que “de acuerdo con el Decreto 0722 de 2013, que reglamenta la prestación del servicio público de empleo, se conforma la red de operadores del servicio público de Empleo y se reglamenta la actividad de intermediación laboral, que dispuso que las Cajas prestarán los servicios de gestión y colocación de empleo de forma directa o a través de entidades que se creen entre las cajas de compensación familiar o con terceros especializados en la correspondiente actividad”.
Señala la asociación que con el servicio público de empleo, se beneficiará una población de 963.707 personas que cotizaban al sistema como asalariados y 47.128 independientes que potencialmente cotizarían al sistema de subsidio familiar.
Indica Asocajas que esto “significará un esfuerzo monumental de las Cajas porque para atender a estos nuevos afiliados se requerirán unos recursos importantes, en especial para cumplir con la cuota monetaria (subsidio en dinero) y los subsidios de vivienda de una población que padece estas necesidades”.
A estos incentivos se agrega que el costo de la nueva afiliación a las Cajas de Compensación es el equivalente al 4% del salario mínimo.
Con ello, el empleador tendrá que pagar alrededor de $24.000, a través de la planilla integrada de liquidación de aportes, PILA, cuyos beneficios son superiores a esta cotización. En general, es una población de salario mínimo que tendrá plena cobertura de todos los servicios del Sistema del Subsidio.