Militarizados los puertos de Venezuela | El Nuevo Siglo
Foto Xinhua
Martes, 12 de Julio de 2016
Agence France Presse

Los puertos de Venezuela quedarán al mando de una autoridad militar, en medio de un plan que intenta superar la dura crisis económica dando más poder a la Fuerza Armada, anunció hoy el presidente Nicolás Maduro.

"Hoy tomamos cinco puertos fundamentales del país: Guanta, La Guaira, Puerto Cabello, Maracaibo y Guamache", dijo Maduro en su programa de televisión, tras una reunión con el ministro de Defensa, Vladimir Padrino.

El mandatario designó el lunes al general Efraín Velasco como presidente de Bolivariana de Puertos, ente que administra las instalaciones de carga marítima del país, para liderar el llamado plan de "abastecimiento soberano", ante la grave escasez de alimentos y medicinas que sufre el país petrolero.

Velasco, anotó Maduro, será la "autoridad única para cada uno de estos cinco puertos".

"Con estas designaciones, con esta toma cívico militar de estos puertos", se espera que "empiecen a funcionar como tienen que funcionar", aseguró el presidente. 

Maduro afirmó que con el despliegue de militares que ordenó desde este lunes en puertos, aeropuertos y empresas se encontró "caos, un desorden", que advirtió sirven para "la corrupción".

El lunes, el gobernante decidió que "todo el mando del abastecimiento en el país" estará en sus manos y en las del ministro de Defensa, subrayando que todos los ministros quedarán subordinados a lo que llamó un "comando presidencial" de "unión cívico-militar".

Cuando firmó el decreto ante las cámaras, Maduro expresó que espera "imponer orden y autoridad en todas las cadenas de la economía" como respuesta a lo que califica como un "sabotaje" de la oposición para tratar de sacarlo del poder. "Esto es una guerra", apuntó.

La Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) tiene un amplio poder político y económico, lo cual ha sido fuertemente criticado por analistas independientes, la oposición, la Iglesia católica y otros sectores.

La caída de los precios del petróleo ha agravado la crisis venezolana, con una escasez de 80% de alimentos y medicinas y una inflación de 180,9% en 2015, proyectada en 720% por el FMI para 2016.

Maduro activó este plan en el marco de un decreto de estado de excepción y emergencia económica que el pasado 13 de mayo fue prorrogado, otorgándole amplios poderes.