Miembros del Inpec habrían ayudado a 'El desalmado' | El Nuevo Siglo
Domingo, 29 de Marzo de 2015

 

El presunto autor material de la masacre de cuatro niños a comienzos de febrero en Caquetá, suroeste de Colombia, se fugó la madrugada del domingo de la cárcel en la que esperaba ser juzgado, informó el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec).

"A las 7H15 (12H15 GMT) nos enteramos por la guardia penitenciara de la ausencia de este interno", dijo a la AFP el coronel Carlos Pineda, director encargado del Inpec.

"Al parecer el tipo aprovechó la noche para emprender la fuga aprovechando el descuido en los protocolos de seguridad", agregó.

Christopher Vega, alias El Desalmado, era uno de los cuatro detenidos por la masacre de cuatro hermanos que conmocionó el país, acusado de ser autor material de la matanza, y estaba recluido en la cárcel de mediana seguridad de Las Heliconias de Florencia.

La policía ofreció50 millones de pesos por información que facilite la recaptura de Vega, mientras tanto el director de la Policía, general Rodolfo Palomino señaló que seguramente el hecho tiene que ver con un cuadro de corrupción que permitió la fuga del delincuente.

“En lo que sin duda alguna debe interpretarse como un cuadro de corrupción, así lo señalo, de alguno o algunos de los miembros de la guardia penitenciaria de la cárcel de Florencia, permitieron la fuga de este delincuente”, aseguró el oficial.

Los niños, de cuatro, 10, 14 y 17 años de edad, miembros de una misma familia, fueron encontrados muertos en su casa el 5 de febrero, con un impacto de bala en la cabeza, de acuerdo con los forenses.

Los menores de edad estaban solos en el momento de la masacre porque sus padres habían viajado a Florencia (capital del Caquetá) para matricularlos en el colegio.

Según la investigación de la Fiscalía, el crimen fue motivado por una disputa por un lote de 400 metros en Florencia y una venganza por motivos personales debido a agresiones personales mutuas con los padres de las víctimas.

De acuerdo con cifras citadas por la estatal Defensoría del Pueblo, encargada de velar por los derechos humanos en Colombia, 1.115 niños, niñas y adolescentes fueron víctimas de homicidio en el país en 2013.