Muy temprano este año le tocó al ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, salir a ponerle la cara al debate sobre la reforma tributaria estructural que se proyecta presentar al Congreso.
El zar de las finanzas públicas precisó que este mes debe conocerse el informe final de la Comisión de Expertos que se conformó el año pasado para hacer las recomendaciones de fondo sobre el ajuste impositivo. Una vez conocido dicho estudio, sus conclusiones deberán ser socializadas y sometidas a un gran debate nacional. Luego le tocará al Gobierno estructurar las bases del respetivo proyecto y llevarlo al Legislativo, posiblemente en el segundo semestre.
Aunque toda la expectativa ha estado centrada en cuál será el porcentaje de aumento del IVA y sus respectivas tarifas diferenciales, Cárdenas enfatizó que el problema de fondo continúa siendo la evasión a este y otros impuestos, por lo que, precisamente, una de las columnas vertebrales de la reforma será establecer mecanismos más eficientes para que las personas naturales y jurídicas cumplan con sus obligaciones tributarias.
Por lo pronto es evidente que Cárdenas tendrá un año muy movido y será, sin duda, uno de los ministros con más, como se dice popularmente, chicharrones a bordo.