Más terrorismo pese a mayor seguridad | El Nuevo Siglo
Miércoles, 1 de Agosto de 2012

Aunque suene paradójico, de acuerdo con el informe del Departamento de Estado de Estados Unidos divulgado ayer, aunque hay un incremento de las acciones de los grupos armados ilegales, también hay una eficiente acción de seguridad por parte del Gobierno de Juan Manuel Santos.

El documento dado a conocer en Washington por Daniel Benjamin, coordinador de Contraterrorismo en el Departamento de Estado, es elaborado anualmente para proporcionarle al Congreso norteamericano un informe completo sobre el terrorismo en relación con aquellos países y grupos que cumplen los criterios establecidos en la legislación.

El informe fue publicado ayer, pero fue entregado al Congreso en abril.

Del documento completo, conocido por EL NUEVO SIGLO, se traducen y adaptan a continuación los apartes más importantes.

 

Colombia

 

Colombia ha luchado durante casi medio siglo con una serie de organizaciones terroristas extremadamente violentas y complejas que trabajan por derrocar o desestabilizar al Gobierno Nacional.

En general, el número de ataques y víctimas aumentó, ya que las Farc volvieron a los ataques de ‘golpear y correr’ en lugar de los encuentros de unidades grandes, mientras cayó el número de terroristas abatidos, capturados o desmovilizados.

Sin embargo, el Ministerio de Defensa y la Policía Nacional han conseguido sorprendentes golpes en contra de varios de los líderes de las fuerzas terroristas, especialmente el asestado el 4 de noviembre al abatir al supremo comandante de las Farc Guillermo León Sáenz, alias Alfonso Cano.

 

Incidentes de 2011

 

Colombia experimentó un gran número de ataques terroristas por las Farc y el Eln. Aún así, los actos y la movilidad de ambos grupos se redujo significativamente en la última década, lo que obligó a adoptar más tradicionales tácticas de guerrilla.

Sin embargo, las Farc y el Eln continuaron representando una grave amenaza para la seguridad de Colombia.

La frecuencia de los incidentes aumentó en septiembre, ya que los grupos armados ilegales trataron de alterar el orden público durante el período previo a las elecciones del 30 de octubre.

El aumento de frecuencia de los ataques continuó durante noviembre, en parte como represalia por la muerte de Alfonso Cano, a principios de ese mes.

No se produjeron incidentes significativos terroristas dirigidos específicamente a Estados Unidos, los ciudadanos o las instalaciones del gobierno estadounidense.

 

Cooperación

 

La cooperación general entre Colombia y Estados Unidos fue excepcional.

Colombia extraditó a más personas a Estados Unidos que cualquier otro país, con 119 presuntos delincuentes en 2011. A diferencia de años anteriores, ninguno de los 119 casos fue bloqueado por las altas Cortes colombianas.

Las autoridades colombianas fueron excepcionalmente útiles para ayudar a las autoridades de Estados Unidos en aproximadamente 20 secuestros y casos de homicidios que involucran a ciudadanos norteamericanos. La Policía Nacional también proporcionó asistencia investigativa y judicial en un puñado de casos de terrorismo que implicaron a organizaciones terroristas internacionales no colombianas.

Colombia es un miembro del Grupo de Acción Financiera de Sudamérica contra el Lavado de Dinero.

Colombia siguió cooperando con Estados Unidos para bloquear los activos de los terroristas y las autoridades policiales colombianas llevaron a cabo varias operaciones durante el año para arrestar y acusar los miembros de redes de apoyo financiero de las Farc.

La erradicación aérea y manual de las drogas ilícitas en Colombia, clave para dificultar las finanzas de los grupos terroristas, destruyó unas 117.000 hectáreas de cultivos ilegales coca y 288 hectáreas de matas de amapola, privando así a los grupos terroristas de importantes fuentes de ingresos.

Colombia empleó un sólido y moderno enfoque interinstitucional de lucha contra la radicalización y el extremismo destinada a fomentar que los miembros y unidades completas de las Farc y el Eln se desmovilicen y se reintegren a la sociedad.

 

 

Cuba y los grupos armados ilegales

 

Cuba

 

Cuba fue designado como un Estado patrocinador del terrorismo en 1982. Los miembros actuales y anteriores de Patria Vasca y Libertad (Eta) siguen residiendo en Cuba. Tres sospechosos de ser miembros de Eta fueron detenidos en Venezuela y deportados a Cuba en septiembre de 2011. Uno de ellos, José Ignacio Echarte, es un fugitivo de la ley española y también se cree que tiene vínculos con las Farc.

Informes sugieren que el gobierno cubano estaba tratando de distanciarse de los miembros de Eta que viven en la isla por las tácticas que emplean.

Informes de prensa indicaron que el gobierno cubano le ofreció atención médica y apoyo político a las Farc. No hay indicios de que el gobierno cubano les dé armas o entrenamiento paramilitar, ya sea Eta o las Farc.

 

Farc

 

Designadas como una organización terrorista extranjera el 8 de octubre de 1997, las Farc son la organización terrorista más antigua, más grande, más violenta y mejor equipada de Latinoamérica.

Las Farc se iniciaron en la década de 1960 como un resultado de las autodefensas campesinas liberales expuestas a la ideología marxista.

Hoy en día, sólo nominalmente lucha en apoyo de los objetivos marxistas y está muy involucrado en la producción y el tráfico de drogas ilícitas.

Las Farc son responsables de un gran número de secuestros. En los últimos años han tomado más 700 rehenes.

Las Farc han sido degradadas por su continua ofensiva militar contra Colombia. Las autoridades han logrado reducir a la mitad el número de guerrilleros, así como capturar o abatir a un buen número de comandantes de nivel alto y medio.

Las Farc han llevado a cabo atentados con bombas, asesinatos, ataques con morteros, extorsiones y secuestros, así como la acción militar convencional contra políticos, objetivos militares, civiles y económicos. Las Farc también han utilizado ampliamente las minas terrestres.

El grupo considera a ciudadanos nacionales y extranjeros como blanco de secuestros para obtener rescate e influencia política.

Se han documentado vínculos de las Farc con la gama completa de actividades de narcotráfico, incluyendo los impuestos, el cultivo y la distribución.

En 2011, investigadores del Gobierno colombiano informaron que las Farc controlan aproximadamente 15 minas de oro en Bolívar y participan activamente en la extorsión de los operadores de equipos pesados ​​en las minas.

Según los investigadores, las Farc podrían estar recibiendo aproximadamente 850 millones de dólares anuales de estas actividades.

Con los años, las Farc han cometido un gran número de actos terroristas de alto perfil, incluyendo el asesinato en 1999 de tres misioneros estadounidenses que trabajaban en Colombia, secuestros múltiples y asesinatos de funcionarios y ciudadanos civiles.

 

Paramilitares

 

Designadas como una organización terrorista extranjera el 10 de septiembre de 2001 por Estados Unidos, las Autodefensas Unidas de Colombia (Auc), comúnmente conocidos como los paramilitares, se formó en abril de 1997.

Después de un proceso de desmovilización en gran escala que comenzó en 2010, la mayoría de la estructura militar central de las Auc fue desmantelada.

Las Auc han llevado a cabo asesinatos políticos y secuestros de trabajadores de derechos humanos, periodistas, profesores y sindicalistas, entre otros.

En tanto que el 70 por ciento de los costos operativos de las Auc se financiaron con los ingresos relacionados con las drogas, algunos de sus miembros nunca se desmovilizaron o son reincidentes y han continuado participando en gran medida en actividades delictivas.

 

Eln

 

El Eln fue designado como una organización terrorista extranjera el 8 de octubre de 1997.

El Eln es un grupo marxista-leninista colombiano que se formó en 1964 con la participación de intelectuales inspirados por Fidel Castro y el Che Guevara.

Su base es principalmente rural, aunque también tiene varias unidades urbanas.

El Eln sigue centrado en atacar la infraestructura económica, en particular petróleo, gasoductos y torres de energía, así como en extorsionar a empresas extranjeras y locales.

El Eln se involucra en los secuestros, atentados con bombas, el tráfico de drogas y actividades de extorsión. El grupo también utiliza la intimidación de jueces, fiscales, testigos y ha estado involucrado en el asesinato de maestros y sindicalistas.

Históricamente, el Eln ha sido uno de los usuarios más prolíficos de las minas antipersonal en Colombia.

Las autoridades creen que el Eln secuestró a por lo menos 25 personas y estuvo involucrado en al menos 23 ataques en 2010, algunos de los cuales se llevaron a cabo conjuntamente con las Farc.

 

 

Irán, Sudán y Siria: inamovibles en “lista negra”

 

Como se ha vuelto reiterativo, Irán se mantuvo en el primer lugar de la “lista negra” elaborada por el Departamento de Estado sobre países que financian, apoyan o promueven el terrorismo.

En el informe sobre terrorismo en 2011, señala que Irán es "el principal patrocinador de la actividad terrorista mundial", aportando fondos para apoyar "a grupos terroristas y militantes en Medio Oriente", mientras que Al-Qaida está en un "camino de declive".

Irán "siguió siendo un activo patrocinador del terrorismo en 2011 y aumentó su actividad relacionada con el terrorismo", afirma el documento.

El objetivo de Irán "fue probablemente sacar provecho de la incertidumbre política que apareció por la Primavera Árabe, además de una respuesta al aumento de la presión internacional sobre Teherán".

Según el informe, Irán facilitó armas y entrenamiento a miembros de Hamás, Hezbolá y los talibanes.

Por otra parte, el informe destaca que, hasta su muerte en una operación comando en su búnker paquistaní en mayo de 2011, el líder de Al Qaida Osama bin Laden había "permanecido profundamente involucrado en la dirección de las operaciones (de la organización) y en sus planes estratégicos".

"La pérdida de Bin Laden y de otros activistas importantes puso a la red en el camino del declive que le será difícil revertir", agrega.

Pero, aunque el núcleo principal de Al Qaida fue debilitado durante el año pasado, "hemos visto crecer grupos afines en el mundo", advierte el documento.

Uno de ellos es Al Qaida en la Península Arábiga (AQAP), "una amenaza particularmente seria" que ganó influencia en el sur de Yemen, y "está explotando la inestabilidad en ese país para incrementar los complots contra intereses regionales y occidentales".

La rama de Al Qaida en el Norte de África (AQMI), "históricamente la más débil de las células, logró dinero en 2011 por el pago de rescates de secuestros", precisó.

Al Qaida también operó en Iraq, donde está ganando terreno desde la salida de las tropas de Estados Unidos en diciembre de 2011 y pese a haber perdido a alguno de sus líderes.

La rama iraquí se ha "recuperado" y "parece que se está expandiendo a Siria, donde estaría intentando explotar la revuelta contra el régimen del presidente Bashar al Asad".

Según el informe, en 2011 hubo más de 10.000 ataques terroristas en el mundo, registrados en 70 países que provocaron unas 12.500 muertes. Pero estos datos reflejan una caída por quinto año consecutivo, con un descenso de los atentados de 12% respecto de 2010 y 29% desde 2007.

2011 fue un "año extremadamente significativo en cuanto a lucha contra el terrorismo", no sólo por la muerte de Bin Laden, sino por las revoluciones de la Primavera Árabe, en las que millones de ciudadanos exigieron cambios en Oriente Medio sin mencionar "la visión incendiaria del mundo de Al Qaida".

El documento también consigna la preocupación de Estados Unidos por las actividades de Boko Haram en Nigeria, que presuntamente tiene conexión con Al Qaida, así como por la situación en la península del Sinaí, en Egipto, donde se han formado grupos de militantes que afirman tener contacto con Al Qaida.

Irán, al igual que los estados en la lista negra Sudán, Siria y Cuba, no puede recibir ayuda económica de Estados Unidos ni gozar de beneficios comerciales ni tratados financieros.

Venezuela, gran preocupación

En otro aparte, el informe constata "modestos avances" en la lucha contra el terrorismo en América Latina durante el año pasado, aunque acusó a Venezuela por sexto año consecutivo de "no cooperar totalmente" con los esfuerzos antiterroristas estadounidenses y advirtió contra la expansión de las actividades iraníes en la región.

El gobierno de Hugo Chávez mantiene "cooperación económica, financiera y diplomática con Irán, así como limitados acuerdos militares", agrega.

En este sentido, el informe recuerda que en mayo de 2011 Estados Unidos impuso sanciones a la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) por sus relaciones comerciales con Irán, que contravendrían las sanciones internacionales decididas contra Teherán por su programa nuclear.

El Banco de Desarrollo y Exportación de Irán sigue operando en Venezuela, pese a que ha sido también sancionado por Estados Unidos, lamentó el Departamento de Estado.

El año pasado Washington incluyó a cuatro funcionarios y oficiales militares venezolanos en una lista negra por nexos con la guerrilla de las Farc.

Estados Unidos dijo que la "más inquietante manifestación" de la expansión iraní en la región fue el complot para asesinar al embajador saudí en Washington, para lo que emisarios iraníes contactaron en México a un miembro de un cártel mexicano, que en realidad era un informante de agencias norteamericanas.

Otro foco de preocupación para el gobierno estadounidense es la Triple Frontera entre Argentina, Brasil y Paraguay, que siguió siendo el año pasado un punto clave de tráfico ilegal y lavado de dinero, "potenciales fuentes de financiamiento de organizaciones terroristas".

En la región no hay células operativas de Al Qaida o de Hezbolá, pero simpatizantes en América del Sur y el Caribe "siguen dando apoyo financiero e ideológico" a esos y otros grupos.

Por el contrario, el gobierno mexicano de Felipe Calderón "siguió vigilante" contra amenazas terroristas y continúa sus esfuerzos contra los cárteles de la droga, de los que Washington no tiene evidencia que tengan lazos con grupos terroristas.