Más operativos por consumo de drogas sintéticas | El Nuevo Siglo
Miércoles, 2 de Julio de 2014

El pasado 11 de marzo, el presidente de la República, Juan  Manuel Santos, y el Ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, presenciaron la demolición en Bogotá de una edificación utilizada para la venta y consumo  de drogas ilícitas. Un mes después, esta estrategia del Gobierno contra el microtráfico se convirtió en orden presidencial para el resto del país.

En consecuencia, la  Policía ha derribado este año 77 inmuebles como este en 27 ciudades, predios que ya se encuentran a cargo de la Dirección Nacional de Estupefacientes (DNE).

Sin embargo, entre los resultados de esta lucha contra el microtráfico de estupefacientes, las autoridades alertaron sobre el aumento en el consumo de drogas sintéticas que, a diferencia de la cocaína o la marihuana, no se obtienen de un vegetal sino a partir procesos químicos realizados en laboratorios caseros.

Según el comparativo de las autoridades, en 2012 el número de incautaciones de marihuana superó en un 76 por ciento al de drogas sintéticas, mientras que el año pasado el de alucinógenos químicos fue mayor al de marihuana en 28 por ciento, un comportamiento que evidencia la migración de este negocio.

Para el general Ricardo Alberto Restrepo, director Antinarcóticos de la Policía, aunque aún existe una demanda de clorhidrato de cocaína o cocaína, “hay una alerta mundial sobre la amenaza que se tiene con las drogas sintéticas y el mundo debe prepararse para este mal que está llegando”.

 

No obstante, Restrepo aseguró que las autoridades colombianas están pendientes de este nuevo fenómeno. De hecho, manifestó que se han incautado algunos tipos de estas drogas “como consecuencia de la capacidad que tiene la Policía de Colombia para adaptarse rápidamente y combatir este tipo de mutaciones que tiene el narcotráfico”.

 

De hecho, el Ministerio de Defensa Nacional reveló que entre 2013 y lo corrido del 2014 se han realizado 370 planes de capacitación internacional contra el tráfico y consumo de drogas ilícitas que beneficiaron a 7.800 funcionarios de diferentes países.

 

Los receptores de la cooperación durante 2013 fueron cerca de 50 países de Centroamérica, Suramérica, Norteamérica, el Caribe, Europa y Asia. Los países que más se han beneficiado son Honduras, Guatemala, Panamá, Ecuador y El Salvador.