Más de un millón de cédulas sin reclamar para elecciones | El Nuevo Siglo
Sábado, 10 de Mayo de 2014

Una jornada especial de entrega de cédulas antes de las elecciones presidenciales de este 25 de mayo adelantará hoy la Registraduría Nacional del Estado Civil, que llamó la atención a los ciudadanos porque hay 1.089.402 de estos documentos sin reclamar en las sedes de la entidad en todo el país. Por tanto sus titulares no podrían votar en estos comicios a pesar de figurar en el censo electoral.

Al total  de cédulas que reposan en los estantes de la Registraduría  se suman 668.388 menores de edad que aún no han reclamado su tarjeta de identidad azul biométrica.

Bogotá es la zona del país con el mayor número de cédulas de ciudadanía pendientes por reclamar con 243.461, seguida por el departamento de Antioquia con 125.569 y Valle del Cauca con 123.815.

En ese sentido el organismo hizo un llamado para “que todos los ciudadanos que aún no han reclamado su cédula de ciudadanía se acerquen a las sedes de la entidad en el país, pues este documento es el único que pueden presentar a los jurados de votación cuando se acerquen a la mesa asignada para ejercer su derecho al voto”.

El registrador Delegado para lo Electoral, Alfonso Portela, explicó a EL NUEVO SIGLO que de 1.089.402  cédulas por reclamar “hay reimpresiones, duplicados, primera vez, hay de todo”.

El funcionario dijo que el millón de cédulas sin reclamar en la Registraduría Nacional “ha sido casi que recurrente, lo que vamos a hacer es adelantar jornadas para disminuir ese ‘stock’”.

 

El censo

El  censo para las elecciones de presidente y vicepresidente de la República este año es de 32.835.856, sin embargo, se espera que para la primera vuelta, el 25 de mayo, por lo menos 16 millones de ciudadanos no voten, teniendo en cuenta los niveles históricos de abstención.

En los comicios presidenciales del año 2010 el censo fue de 29.983.279 ciudadanos, sin embargo, en la primera vuelta apenas sufragaron 14.781.020, lo que significó una abstención del 51%. En tanto que en la segunda vuelta de esos comicios, a la que arribaron Juan Manuel Santos y Antanas Mockus, participaron en las urnas 13.296.924 ciudadanos, por lo que la abstención subió al 56%.

De ahí la importancia que sean reclamadas por sus titulares el más de un millón de cédulas que están en la Registraduría porque por lo menos 500 mil de esos colombianos votarían, ateniéndose a los históricos de participación en este tipo de comicios.

A pesar de que a diferencia de otros países el voto en Colombia no es obligatorio, sí es un deber de todo ciudadano participar y manifestarse a través de este ejercicio, pilar fundamental de la democracia, ya sea escogiendo entre el abanico de opciones de candidatos, en esta oportunidad son cinco, o sufragando en blanco.

El censo electoral es el total de ciudadanos habilitados para votar y se actualiza diariamente con la inclusión y exclusión de las cédulas de ciudadanía de los colombianos. Tomando como base el censo electoral utilizado en los últimos comicios se incorporan las cédulas inscritas durante el periodo de inscripción programado y se adicionan las cédulas expedidas por primera vez hasta dos meses antes de la respectiva elección.

En este sentido, los comicios presidenciales de este año presentan una novedad en materia de censo electoral frente a las realizadas en 2010, pues como consecuencia de las disposiciones de la Ley 1475, la inscripción de cédulas se puede hacer hasta dos meses antes de la fecha de los comicios, antes era hasta cuatro meses antes.

Del censo electoral se excluyen las cédulas de los miembros activos de las Fuerzas Militares porque la Constitución establece que no tienen derecho al voto mientras sean efectivos de alguna de las fuerzas y los documentos cuyo estado de vigencia fue afectado por muerte del ciudadano durante el lapso comprendido entre la última elección y la fecha de conformación.

También son excluidos del censo electoral los ciudadanos condenados, quienes pierden sus derechos políticos mientras que cumplen la condena que estableció un juez de la República.

 Desde 1990, cuando los ciudadanos realizan el trámite de la cédula de primera vez, ingresan automáticamente al censo electoral.

 

Última vez

Las presidenciales de 2010, tanto en la primera como en la segunda vuelta, fueron los últimos comicios en que se pudo votar con las cédulas de ciudadanía blanca laminada y café plastificada, las cuales fueron reemplazadas por la cédula amarilla con holograma vigente al día de hoy.

La Ley 757 de 2002 ordenó la renovación de cédulas, para lo cual dio un plazo hasta el 1° de enero de 2006. Sin embargo por medio de la Ley 999 de 2005 este plazo se prolongó hasta el 31 de diciembre de 2009.

Empero en diciembre de 2009 por medio del Decreto 4969, nuevamente se extendió hasta el 30 de julio de 2010 el plazo para que los colombianos renovaran su cédula, pues a la fecha cerca de dos millones de ciudadanos no habían hecho ese cambio.

En ese sentido en dicho momento se justificó ampliar el plazo por los inconvenientes que tendrían los ciudadanos a partir del 1º de enero de 2010 al no tener un documento válido ante el Estado para poderse identificar, reclamar pensiones, subsidios, tramitar pasaportes etc. Sumado a esto, el sector privado exige la presentación de la cédula de ciudadanía para realizar diferentes actos entre particulares. Sin embargo, aunque no se dijo, otra razón de peso fue que los más de dos millones de colombianos que no habían renovado el documento era necesario habilitarlos para votar en las presidenciales de ese año.