En su informe final sobre las discusiones de política monetaria y de inflación de la Junta Directiva del Banco de la República, se destaca que la encuesta mensual que realiza la entidad mantuvo las expectativas del IPC en 2,6 por ciento para este año.
De acuerdo con el análisis, las expectativas de inflación no registraron cambios importantes en el último mes. Según la encuesta mensual del Banco a los analistas del mercado financiero, la inflación esperada a diciembre de este año se mantuvo en 2,6% mientras que la de 12 meses se volvió a situar en 3,1%.
Por su parte, las expectativas de inflación derivadas de la curva de rendimiento de los TES a horizontes de 2, 3 y 5 años, se mantienen entre 2,4% y 3,0%, niveles similares a los observados en junio.
Señalan las minutas, que el promedio de los cuatro indicadores de inflación básica monitoreados por el Banco de la República, se situó en 2,54% en julio, valor similar al del mes anterior (2,52%). Este indicador ha mostrado una gran estabilidad en torno a 2,5% desde febrero de este año.
De otra parte, la última información sugiere que el consumo de los hogares se habría expandido a una mayor tasa durante el segundo trimestre que en el primero. Tanto los buenos niveles en el indicador de confianza de los consumidores, que entre abril y junio se situó en niveles similares a los registrados a finales de 2011 y por encima del nivel promedio para 2012, como la mejor dinámica del comercio justifican este pronóstico.
En referencia a este último, en junio las ventas del comercio minorista aumentaron 4,1% anual frente al mismo mes de 2012. Para el total del segundo trimestre el índice de ventas del comercio creció anualmente 4,9%, cifra mayor que la registrada para el agregado de los primeros tres meses de 2013 (0,8%).
Otro indicador que sugiere la aceleración del consumo es el balance de ventas totales de la Encuesta Mensual de Expectativas Económicas (EMEE) del Banco de la República que se ubicó en niveles superiores al promedio del primer trimestre.
Para la inversión, las caídas en las importaciones de bienes de capital y en el balance de las expectativas de inversión de corto y mediano plazos de la EMEE siguen indicando que aquella distinta a la destinada a construcción de edificaciones y de obras civiles continuaría con un desempeño mediocre.
En lo referente a las exportaciones, durante el primer semestre del año las totales en dólares cayeron 4% respecto al mismo período del año anterior. Dicho comportamiento se explica, principalmente, por la disminución de 8% en las exportaciones de productos de origen minero, dada la caída de 29% en las de carbón y de 12,6% en las de oro.
A su vez, las exportaciones de bienes agrícolas también cayeron, aunque en menor magnitud (-2%). Por su parte, las exportaciones de bienes industriales y otros registraron un crecimiento anual de 9%.
Durante el primer semestre de 2013, el valor total en dólares de las importaciones CIF cayó 1% anual, dadas las menores compras de materias primas (-2,7%) y de bienes de capital (-1,7%). Por su parte, las importaciones de bienes de consumo crecieron en el período 4,2%.
En lo que respecta a las distintas ramas de actividad económica, se sigue esperando que la industria continúe contrayéndose aunque de forma menos acentuada, mientras que la minería, la construcción, la agricultura y el comercio presentarían un buen comportamiento.
El índice de producción industrial sin trilla de café cayó en términos anuales 5,5% en junio. Con este dato, el segundo trimestre se contrajo 0,3% (luego de -6,6% en los tres primeros meses del año), mientras que el año corrido se ubicó en -3,4%.
En el sector de la construcción la información para el segundo trimestre sugiere que la expansión se mantendría. La producción de cemento mostró un crecimiento anual de 0,71% mientras que los despachos lo hicieron en 4,3%. Por su parte, aunque las licencias de construcción registraron una contracción en junio, el acumulado de doce meses continúa creciendo alrededor de 7,6%.