Bruce Mac Master hace una radiografía del panorama económico este año y lo que puede pasar en medio de la campaña electoral. Analiza las cifras principales y lo que está pasando frente a las restricciones en Ecuador y la crisis en Venezuela. También se refiere al impacto del programa de las 100 mil casas gratis y responde si hay o no riesgo de una enfermedad holandesa
EL NUEVO SIGLO:- ¿Hasta qué punto considera que los gremios deben mantenerse alejados del debate electoral?
BRUCE MAC MASTER:- Totalmente. Los gremios no tienen una función política, ni por supuesto una función electoral, los gremios tienen unos afiliados a quienes representan y por quienes hay que velar en términos de cuidar sus intereses. Por supuesto tienen otra función, que es la función de colaborar en el desarrollo del país. Eso se hará con uno o con otro gobierno, con uno o con otro Congreso, de manera que los gremios no tienen un papel que jugar en la política electoral. Lo que sí es muy importante desde el punto de vista de la política, y ese sería un llamado que le haría a todos los partidos, es que no polaricemos demasiado el país alrededor de una necesidad electoral, no tiene demasiado sentido y es un mal negocio polarizarlo para tratar de ganar unas elecciones. En realidad Colombia ha venido sufriendo durante muchos años los embates de la violencia, y profundizar la polarización no es inteligente.
ENS:- ¿El clima de campaña electoral impactará el desarrollo de la economía en el primer semestre?
BMM:- Colombia históricamente no se ha visto afectada por las elecciones, en términos de su desempeño económico; en algunos casos se han presentado casos excepcionales en donde el año electoral ha sido el año de mejor desempeño económico. Le tengo temor a que se polarice demasiado nuestra sociedad y eso daña no solamente el clima de negocios, sino el clima general de institucionalidad. Diría que históricamente Colombia no es vulnerable y, segundo, haría un llamado a que la polarización no sea una estrategia electoral.
ENS:- ¿Cree que la crisis política que se presenta en Bogotá puede afectar la dinámica comercial de Bogotá?
BMM:- Sin duda la incertidumbre, más que la crisis política que se ha venido viviendo alrededor de Bogotá, es una causa de zozobra e incertidumbre sobre todos sus habitantes: empresarios, ciudadanos, estudiantes, funcionarios públicos. Es muy importante tener instituciones sólidas, que funcionen, estables. Quisiera ver muy pronto la solución, cualquiera que ella sea, una solución que nos dé estabilidad de aquí hacia adelante.
Lupa a cifras
ENS:- ¿Cómo cerrará la inflación en 2014? ¿Será menor al récord de este año o subirá por encima del 2 por ciento?
BMM:- Es difícil que así sea y el Banco de la República ya se ha pronunciado sobre eso. Nos dio una cifra proyectada para este año y es cercana al tres por ciento, es la cifra que, incluso, se utilizó en la concertación del salario mínimo. Creo que es difícil que la inflación sea menor que la del año anterior.
ENS:- Todas las predicciones nacionales e internacionales sostienen que la economía en Colombia puede estar creciendo este año entre 4,5 y 5 por ciento del PIB ¿Qué tan real es esto?
BMM:- Lo que hacemos nosotros y lo que hacen los analistas políticos y económicos, es medir efectivamente cuáles son las diferentes variables de los indicadores líderes que pueden decir qué va a pasar con la economía. Lo que nosotros hemos visto es que muy probablemente podría ser cerca al 4 por ciento. Ojalá fuera más cerca al 5, que al 4,5%, pero nosotros sí creemos que va a estar muy alrededor al 4,5%. En todo caso, hay que tener en cuenta que veníamos de un año que no se esperaba que fuera tan bueno. De manera que el hecho de que tengamos en este momento un año próximo, por venir del 4,5 por ciento, eso es una buena noticia. Adicionalmente la definición que hizo el Banco de la República, junto al Ministerio de Hacienda, sobre el crecimiento potencial de la economía, es justamente del 4,5 por ciento en el largo plazo…
ENS:- ¿Cómo se le puede explicar a la opinión pública que la economía crezca entre 4 o 5 por ciento, mientras que la industria sigue de capa caída?
BMM:- Evidentemente la industria es uno de los varios sectores que hay en la economía. Colombia tiene, además, otros sectores como el de servicios, comercio, financiero y bancario, de minas, energía y petróleo, también de infraestructura, construcción… Es decir, la industria es uno de los varios sectores. De hecho, la ANDI tiene casi todos estos sectores dentro de sus afiliados, tiene también industriales, pero la industria ha tenido unas características especiales y tiene sectores a los cuales les ha ido muy bien; tenemos unos sectores en donde los crecimientos han sido muy notorios, otros en donde el crecimiento no es bueno y, de hecho, la cifra final para la industria, como un todo, no es todavía una cifra en positiva.
Nosotros tenemos cifras que en este momento nos muestran cómo a finales de noviembre del año pasado, y eso lo acaba de indicar el DANE, el decrecimiento año corrido fue de 0,6 por ciento. Y quizás la buena noticia es que el año pasado tuvimos un dato a noviembre de -4,3 por ciento. Ahora el acumulado sigue siendo un acumulado negativo. En estos momentos de -2,2 por ciento, cuando era el 0,1 por ciento. Esto lo que significa es que el primer semestre del 2013 fue bastante más malo que lo que había sucedido en 2012 y bastante más malo de lo que había sucedido en el segundo semestre de 2013. Es decir, aparentemente, se está revirtiendo y ojalá se revierta esta tendencia. En todo caso, a la economía colombiana todavía le faltan cambios estructurales; contar con cosas que no tienen como, por ejemplo, logística, transporte, infraestructura, lo que nos tiene que ayudar para que realmente la economía y la industria despeguen.
ENS:- ¿Qué opina de los analistas que insisten en qué Colombia aún corre el riesgo de una enfermedad holandesa?
BMM:- Colombia tiene que seguir tomando medidas para que ese riesgo no se presente, de ahí que nosotros hubiéramos hecho el énfasis en que sectores como la agroindustria entren a hacer parte de prioridad número uno que tenga el país
¿Cómo se combate la enfermedad holandesa? Se combate de dos formas: o deja de exportar los bienes que genera la enfermedad holandesa, lo cual no sería inteligente, o crea sectores alternativos que no dependan de esas exportaciones, que sean las que generen desarrollo en el largo plazo. También busca la forma de que esos recursos que se produjeron por ese boom, se inviertan en estos sectores.
Hemos venido insistiendo en que esos dineros hay que invertirlos en dos sitios: en infraestructura, y ahí vemos las decisiones que el Gobierno está tomando y, segundo, en agroindustria, en donde quisiéramos ver muchos más desarrollos. Tenemos todas las ventajas del mundo: competitivas, comparativas, tierras fértiles, ubicación excepcional… De manera que el país sí debería hacer un esfuerzo importante por desarrollar su agroindustria.
¿No piden?
ENS:- ¿Qué responde a quienes dicen que hay algunos gremios, sobre todo del agro, que no hacen sino pedir subsidios, mientras que otros, como los industriales, siempre tratan de salir con sus propios resultados sin tener ayuda estatal?
BMM:- Colombia en términos generales debe buscar la forma de ser más eficiente, más competitiva en términos internacionales. Para eso debemos tener grandes decisiones importantes. Hay algunos sectores que argumentan que la razón por la cual no somos competitivos es porque no tenemos infraestructura adecuada. Bueno, entonces, hay que tomar decisiones para darle la infraestructura adecuada y que ese sector pueda ser competitivo y de clase mundial. La altillanura se va a poder desarrollar cuando pasen varias cosas, como la estabilidad jurídica en términos de la tenencia de las tierras; cuando tengamos infraestructura, podamos sacar los productos de allá, tengamos seguridad… Cuando todo eso se dé, la altillanura será una potencia mundial. De manera que cada gremio hace su tarea y cada gremio se encarga de tener el mejor resultado para sus afiliados pero, al final, el trabajo debe ser conjunto con los gobiernos, cualquiera que sea.
ENS:- Ya llevamos más de un año de vigencia de los TLC. ¿Cuál ha sido su impacto real y hasta qué punto se puede decir que son buenos o malos?
BMM:- Pues hay de todo. Cada uno tiene sus propias características. Diría que los TLC ya existen y que Colombia debe hacer un esfuerzo muy grande para aprovechar al máximo sus bondades y ajustar su aparato industrial, comercial y agrícola para aprovecharlos. Tenemos un reto por delante y los resultados están por verse. En el caso del de Estados Unidos hay cosas que han incrementado el comercio. En el caso de la Unión Europea, hay que trabajar mucho en que los TLC no solo se refieran exclusivamente a la venta de commodities. Colombia tiene que hacer un esfuerzo importante para estar en la cadena productiva internacional, en la cual están involucrados países de Europa.
ENS:- Ecuador parece enrutarse a una política proteccionista en materia comercial ¿Qué tanto nos puede impactar?
BMM:- Nosotros hemos venido llamando la atención sobre algunos reglamentos técnicos que se han adoptado últimamente en Ecuador. Definitivamente hay que darle solución, tenemos en estos momentos un trabajo conjunto con la embajada de Colombia en ese país. Es muy importante para Colombia que ese reglamento no signifique un obstáculo para el comercio que se presenta entre los dos países.
El dólar
ENS:- ¿Cómo ve el panorama del dólar este año? ¿Llegaremos a los $2.000 o, en algún momento, bajaremos a los $1.900?
BMM:- No es fácil decirlo porque el dólar está marcado por dos variables principales. Una, que es la variable internacional, es ver cómo se comporta la divisa frente al resto de monedas y, evidentemente, la moneda es la relevante para los cálculos de una economía como la colombiana, es el dólar frente al euro, y ahí tenemos una incertidumbre grande, porque esa es una variable exógena. Sin embargo, Colombia trata de hacer unos esfuerzos particulares, unos esfuerzos propios, que son los de contrarrestar esas bajas que se han presentado en los últimos años, y ahí están las intervenciones del Banco de la República, por supuesto. Esas intervenciones creemos que son adecuadas, que se tienen que seguir haciendo. El Gobierno y el Banco de la República tienen que seguir haciendo ese esfuerzo. Mucha gente sabe que con esas intervenciones se están aumentando las reservas internacionales y Colombia tiene una situación bastante más tranquila que hace algunos años, desde el punto de vista internacional. Cada peso que se invierta en materia de tasa de cambio es un peso que se revierte en desarrollo económico, industrial y generación de empleo.
Infraestructura
ENS:- ¿Qué tanto el programa de infraestructura va a impulsar la economía?
BMM:- En todos los países los programas de infraestructura tienen dos efectos grandes, que es la inversión que se realiza en la infraestructura misma y, el segundo, la competitividad. Evidentemente el segundo está lejos de verse todavía porque las obras que se van a empezar estarán listas dentro de tres años y, seguramente, la última de ellas será dentro de 8 años. Sin embargo, hay una parte importante que es la entrada de una buena parte de recursos para la construcción de las mismas. Dentro de eso están los 50 billones de pesos que se habían anunciado como inversión. Creo que ya no son 50, sino cerca de 60 billones de pesos. Pero ojo porque ese dinero no va a entrar inmediatamente a la economía, muchos de esos recursos se comenzarán a invertir en el segundo semestre del año, porque el primero será de diseño, de desarrollo y de estructuración de proyectos. Y habrá algunos que no alcancen a arrancar sino hasta 2015. De manera que si bien vemos con mucha satisfacción que estos proyectos entren, lo cierto es que el 2014 no será un año en que se verán plenamente los efectos sobre la economía.
ENS:- ¿Cuál ha sido el impacto real del programa de las 100 mil viviendas gratis en las cifras del PIB?
BMM:- Pues de las 100 mil viviendas no sé exactamente, pero las cifras que conocemos son de crecimiento de construcción y, efectivamente, uno de los sectores que se ha presentado como líder en términos de jalonamiento económico, ha sido el de la construcción. En todo caso, las cifras totales de las 100 mil viviendas son cerca de 5 billones de pesos invertidos, algo del año pasado y a lo largo de este 2014.
¿Y la equidad?
ENS:- La izquierda y la oposición al Gobierno sostienen que si bien económicamente se crece, los índices de concentración de riqueza siguen aumentando y que ese progreso no se está repartiendo debidamente entre las clases menos favorecidas ¿Qué opina?
BMM:- El índice Gini, que mide el ingreso en Colombia, ha venido mejorando. El Gini de 2010 era 0,56 y en julio del año pasado fue de 0,53. Es decir, hubo una mejora significativa en la forma como se están distribuyendo los ingresos. Solamente en nuestro hemisferio Ecuador tuvo una mejora de Gini, mejor que la colombiana. Ahora, una pregunta distinta es si la distribución del ingreso actual es aceptable. Y la respuesta es que no es aceptable: Colombia tiene que hacer unos esfuerzos grandes por tener una mejor distribución del ingreso, y en eso debemos contribuir todos los colombianos.
Caso Drummond
ENS:- ¿Cuál será el impacto a nivel internacional que tendrán las medidas que se han tomado contra la Drummond por el problema del cargue de carbón en Santa Marta? ¿Se podría afectar el clima de inversión extranjera o el de seguridad jurídica?
BMM:- Creo que al final el Gobierno nacional ha hecho sus análisis y la Drummond tendrá que presentar su defensa. Eso no significa que haya cambios en las reglas de juego. Creo que una cosa no está relacionada con la otra. La Drummond tiene muy seguramente sus razones y estrategia de defensa.
ENS:- La economía venezolana está en uno de los peores momentos de los últimos años ¿Qué riesgo hay sobre un coletazo real en Colombia?
BMM:- Venezuela pasó a significar un tercio de lo que significaba en nuestras exportaciones… Colombia ya recibió el golpe grande. El país lo que tiene es una inmensa oportunidad el día que la economía venezolana despegue. Y, por supuesto, tiene todo el potencial para hacerlo. Somos cercanos, socios, vecinos, deberíamos ser uno de los primeros que entráramos a hacer parte de un boom en caso de que se presentara. La economía venezolana ya ha tenido un golpe suficientemente duro, pero es difícil que se incremente.