El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, confió este miércoles en un repunte de los precios del petróleo tras el acuerdo logrado con otros grandes productores pero pidió no "cantar victoria".
Maduro señaló que las medidas propuestas junto con Arabia Saudí, Rusia -los dos mayores productores mundiales de crudo- y Catar deberían "impactar positivamente los muy bajos precios petroleros" de la actualidad.
Pero que "nadie cante victoria todavía", matizó el gobernante en una alocución televisiva en la que anunciaba medidas para enfrentar la grave crisis económica en que está inmersa Venezuela, el país con las mayores reservas de crudo del planeta.
Los cuatro países acordaron el martes en Doha congelar su producción de crudo a los niveles de enero, a condición de que otros grandes productores se sumen a la iniciativa.
Este miércoles, Irán expresó su apoyo a dichas medidas, un anuncio que generaba expectativa dado que Teherán había anunciado su intención de aumentar la producción para recuperar mercados tras el reciente levantamiento de las sanciones que le habían impuesto las grandes potencias por su programa nuclear.
Maduro sostuvo, además, que "hace falta una nueva alianza" entre los países que integran la OPEP y otros que no pertenecen al cártel de productores de crudo "para reconfigurar la forma en que producimos, accedemos al mercado y la manera como se fijan los precios", que según dijo están en su punto más bajo en 45 años.
El mandatario socialista admitió que ese objetivo es crucial para su país, cuyos ingresos petroleros -que generan 96% de las divisas- pasaron de 37.200 millones de dólares en 2014, a 12.567 el año pasado.
El anuncio de un posible congelamiento de la producción surtió el martes poco efecto en los mercados, que esperaban recortes para absorber el exceso de oferta. Las cotizaciones del crudo cerraron incluso en retroceso, después de un breve repunte.
El miércoles, sin embargo, repuntaron ante la perspectiva de una adhesión iraní a la iniciativa.
/AFP