Lupa de la CIDH a programas en el Valle | El Nuevo Siglo
Miércoles, 12 de Agosto de 2015

 

Los avances en políticas públicas y la ejecución de los proyectos en pro de la población más vulnerable de la región fueron socializados por la Gobernación del Valle del Cauca a través de las Secretarías de Asuntos Étnicos, Desarrollo y Participación Social y Alta Consejería para la Paz, en el marco de la visita a Colombia de la presidenta de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Rose-Marie Belle Antoine.

El secretario de Asuntos Étnicos del Valle del Cauca, Alexánder Rojas, manifestó que “esta es una oportunidad que tenemos para exponer todos los avances que hemos tenido beneficiando al sector social y en especial el afro descendiente de nuestro departamento. Esta reunión ha sido fructífera porque con varios secretarios de despacho departamental, mostramos el cumplimiento de las normas y el fortalecimiento del sector cultural y social de nuestro Valle del Cauca”.

“Además de reunirnos, manifestamos también algunos sectores que faltan por fortalecerse en el departamento, no obstante es una oportunidad grande contar con la visita de la presidenta de la comisión para que a través de ella, muchas organizaciones se enteren del continuo trabajo que hacemos en el departamento para beneficiar toda la población”, dijo Fabio Cardozo, alto consejero para la paz de la administración departamental.

Ledis Torres, secretaria de Gobierno del Distrito de Buenaventura, expresó también su agradecimiento a la presidenta de la comisión por visitar el departamento y dijo que “en Buenaventura se ha venido fortaleciendo el sector productivo donde trabajamos en conjunto con el departamento y la nación para seguir disminuyendo la violencia y demás problemas sociales que afectan el resto de la población”.

uerrillas, paramilitares, fuerzas militares y narcotraficantes.

 

De acuerdo con un reciente informe del estatal Centro Nacional de Memoria Histórica, Buenaventura es la ciudad de “mayor índice de desplazamiento interurbano de Colombia”, y ha sido escenario de unos 4.800 homicidios entre 1990 y 2012.

Además, entre 1990 y 2013, se contabilizaron 26 masacres y 475 personas desaparecidas en esta localidad.