Las opciones que la selección Colombia tiene como volantes defensivos o mixtos son amplias y distintas, por el gran recorrido internacional que hombres como Carlos Sánchez, Edwin Valencia, Abel Aguilar, Freddy Guarín y Aldo Leao Ramírez le dan al mediocampo nacional, lo que los hace prenda de garantía para un seleccionado colombiano que en esa zona tiene las cosas totalmente claras.

Los fijos

Carlos Sánchez: el “perro de presa” del Elche es a sus 27 años un rocoso mediocampista de marca puro, ideal para misiones especiales como controlar individualmente a elementos potencialmente peligrosos de los rivales que tendrá la tricolor como Yaya Touré de Costa de Marfil y Keisuke Honda de Japón. La posición ideal de Sánchez es como volante tapón o cabeza de área jugando con extremos o como centro de un trío de contención.  

Edwin Valencia: tras superar su polémica ausencia por años de los procesos de selección Colombia, este polifuncional volante de 28 años del Fluminense ha sido una de las más gratas revelaciones para José Pekerman. Precisamente han sido sus faltas por lesión las que han coincidido con los momentos negativos del equipo nacional, por lo que se vuelve un jugador fundamental en el esquema del argentino, además de que en cualquier momento puede dar una mano como defensa central.

Abel Aguilar: esencial para el seleccionador, el futbolista de 28 años del Toulouse no está exento de cuestionamientos por parte de la fanaticada, pues no le reconocen suficiente entrega ni espíritu cuando se pone la amarilla. El verdadero problema con Aguilar es su irregularidad, pues ha tenido presentaciones descollantes junto con otras en las que aporta realmente poco. Sin embargo, cuando está en su nivel es un contribuyente vital, por lo que se espera que en Brasil entregue lo mejor de su fútbol.

Freddy Guarín: después del fiasco con su fallida transferencia a la Juventus, el Inter de Milán no lo dudó un instante en hacer las paces con el volante mixto de 27 años dándole una jugosa renovación de contrato hasta 2017. Y así como el Inter pensó en el mediano y largo plazo con esa oferta, la Selección debe hacer lo mismo, ignorando el hecho de que Guarín no pueda jugar el primer partido del Mundial por suspensión. Contra equipos como Japón y Costa de Marfil, su combatividad y desdoblamiento ofensivo pueden ser de gran ayuda.

Aldo Leao Ramírez: cada vez se desempeña  mejor el organizador de juego del Morelia mexicano, a sus 32 años. Ramírez impresiona por su manejo de los ritmos del partido y su visión de juego que desde la primera línea de volantes puede fácilmente traducirse en jugadas de gol. El fútbol de Ramírez está en la cresta de la ola y nada de raro tendría que fuera uno de los elegidos desde las primeras de cambio en la cita orbital.

Quizás, quizás…

Alexánder Mejía: todavía se recuerda lo que el recio volante de Atlético Nacional hizo con Messi en Buenos Aires y tener ese tipo de marcajes individuales contra jugadores estelares como los que enfrentará Colombia en la Copa del Mundo. Sin embargo, llevarlo no puede ser a costo de quienes ya están como fijos, por lo que sumar a Mejía podría hacer que Colombia pierda un jugador clave en otra posición. De todos modos, a sus 25 años Mejía aún tiene mucho fútbol por delante.

La opción

Elkin Soto: el grupo está tan claro y es tan amplio en este sector del campo, que solo “El Sultán”, por haber sido parte del proceso, puede decirse que tenga alguna posibilidad de volver al seno del equipo. Sin embargo, la poca participación que tuvo el jugador del Mainz alemán de 33 años con la camiseta amarilla siempre dejó claro que era de los prescindibles. Quizás tenga aún crédito por su experiencia, pero el tren parece estarlo dejando.