Los retos para vivir en la ciudad soñada | El Nuevo Siglo
Foto El Nuevo Siglo - Juan Sebastián Cuellar
Sábado, 26 de Noviembre de 2016
Redacción Bogotá

Como tema central, durante el Seminario de Actividad Edificadora realizado por Camacol B&C, que se realizó esta semana en Bogotá, Andrés Ortiz Gómez, secretario de Planeación Distrital presentó la revisión del Plan de Ordenamiento Territorial (POT) a la luz de los desafíos planteados en la pasada reunión de Hábitat III.

Uno de los indicadores más relevantes dentro de los compromisos de transformar la ciudad con base en la sostenibilidad integral, como eficiencia energética, sobresalió la construcción de 7 troncales de Transmilenio y de más de 400 kilómetros de ciclorrutas, además de la legalización y mejoramiento integral de 216 barrios, cuya meta busca cumplirse antes de 2018.

Factor vivienda, principal meta al 2050

“Plan de Ordenamiento Territorial y los retos de Hábitat III”, fue el nombre de la conferencia de Ortiz, donde sin lugar a dudas tomó la ciudad como principal factor de cambio y donde presentó cinco retos planteados en Hábitat III proyectados a 2050: el crecimiento poblacional en el ámbito urbano, el desarrollo sostenible, las oportunidades para superar la inequidad y la exclusión económica y social.

Ortiz destacó que en materia de vivienda el reto para Bogotá es grande, ya que en 2050 se necesitará 2.7 millones de unidades para atender las necesidades habitacionales de los 13 millones de habitantes que se proyectan para la capital. Para lograrlo, el Secretario evidenció la necesidad de habilitar suelo en renovación urbana y en expansión.

Esta expansión deberá ir en línea con lo propuesto en Hábitat III, donde se plantea el desarrollo de ciudades compactas, con una movilidad que prioriza el transporte público masivo. La Administración Distrital coincide con este desarrollo planteando una densidad, “pero con equilibrio urbano, donde se genere espacio público de calidad, con total equilibrio con la región, donde los POT entre los municipios puedan estar armonizados”, aseguró Ortiz.

Explicó además que en este punto se han avanzado en convenios con algunos municipios cercanos a Bogotá. “Es necesario encontrar una estructura de Bogotá-región, en donde se contemplen temas de gobernabilidad, movilidad, estructura ecológica, entre otras”, agregó.

Otro de los componentes en los que se trabaja en línea con Hábitat III, se enfoca en superar de manera urgente el rezago de transporte público que tiene la ciudad. En esto, el Metro será el eje de articulación de los cuatro puntos cardinales. “Es fundamental dentro del reto de movilidad, la construcción de más troncales: Avenida ALO, Avenida Ciudad de Cali, Boyacá, Calle 13, Carrera Sétima, Calle 170, entro otros”, dijo Andrés Ortiz. Además, que la Administración seguirá trabajando en la creación de incentivos para el transporte público alternativo.

Kilómetros de nuevas ciclorrutas

Otro de los principios de Hábitat III, que para el Secretario de Planeación debe ser la base del POT de Bogotá, es el concepto de desarrollo urbano adecuado compatible con la sostenibilidad ambiental. En este desarrollo se debe apostar por ciudades gobernables, con instrumentos efectivos y proyectos financiables.

Como ejemplo de la aplicación de estos instrumentos para hacer mejor ciudad y mejor urbanismo, Ortiz citó a Lagos de Torca, el Plan Zonal del Norte propuesto para Bogotá, lo que definió como un proyecto que apuesta por ser exitoso para el sector privado y que genera un gran impacto positivo para el desarrollo de la ciudad.

Otro de los retos es “lograr cumplir lo que dice la ley sobre que los planes de desarrollo y los planes de ordenamiento sean coherentes y se puedan desarrollar en línea. En estos planes se deben respetar las metas que plantean para hacerlas realizables”, dijo el conferencista.

Bases de Quito 2016

Sobre la declaración de Quito 2016, el Secretario enfatizó sobre ciudades sostenibles que el 54.5% de la población mundial vivirá en centros urbano, así mismo resaltó ejes como el fortalecimiento de la cooperación y repensar cómo se construye, gerencia y vive en las ciudades.

Por otra parte, destacó los compromisos para el derecho a la ciudad como democracia urbana en los que señala aspectos primordiales a trabajar tales como igualdad de derechos y equidad de género, acceso a vivienda digna con habilitación de suelo (VIS y VIP), a servicios básicos, al transporte y espacio público, a un consumo sostenible y a una resiliencia a desastres naturales.

Como principales compromisos en la sostenibilidad integral está la inclusión social que incluye: erradicación de la pobreza, seguridad de la propiedad y acceso al espacio público y como oportunidades para todos y prosperidad urbana: la transformación.

Por su parte, la gerente de Camacol Bogotá y Cundinamarca, Martha Moreno Mesa, habló sobre los aportes que se pueden hacer para lograr que el nuevo POT de Bogotá apunte a la construcción de ciudades de calidad que viene promoviendo el Gremio, y que se alinea con los retos planteados por Hábitat III. Destacó además la necesidad de revisar la metas pendientes que hay en lo que estaba formulado en el POT 190. “La próxima revisión del POT es una oportunidad para hacer una transformación real del territorio. La planificación debe estar en función de las dinámicas demográficas y las relaciones funcionales de Bogotá con su área de influencia. Generar calidad de vida para los residentes y mejorar las condiciones urbanísticas, y en especial los rezagos en soportes urbanos que quedaron pendientes con el POT actual. De ser así, las buenas decisiones del ordenamiento serán respaldadas por la inversión privada y podrán promover la competitividad y consolidar el valor de la ciudad-región”, dijo la dirigente gremial.

Otros aspectos que el Secretario resaltó para vivir en una ciudad soñada, “Bogotá debe tener como finalidad la felicidad ciudadana y producir este efecto a través de una ciudad planeada, equilibrada, ambientalmente sostenible, incluyente, eficiente y respetuosa”.

Además enfatizó en querer “descentralizar la ciudad a lo largo del transporte público masivo y eficiente, densificando los corredores que cuenten con los equipamientos y el espacio público que lo soporten. Que ocupe el menos terreno de sabana posible y genere el menor consumo de energía per cápita del mundo”, dijo el Secretario al cierre de su presentación.