Los matices de la reforma a la salud | El Nuevo Siglo
Domingo, 7 de Abril de 2013

Con tropiezos y retrasos, la reforma a la salud empezará próximamente su discusión en el Congreso de la República, y las dudas sobre el verdadero papel de los gestores de salud al reemplazar a las EPS, el manejo de los recursos, la integración vertical y la eliminación de la tutela, hacen parte de la gran baraja de cuestionamientos que persisten en el ambiente.

En diálogo exclusivo con EL NUEVO SIGLO, el coordinador ponente del proyecto, el senador Mauricio Ospina, explicó que uno de los puntos más preocupantes de la reforma es la confusión de la inembargabilidad de los recursos.

“Lo peor que está pasando en este instante es que de entrada se dice sobre la inembargabilidad de los recursos, pero en el momento en el que se le giren al gestor dejan de ser públicos”, alertó el congresista.

Puso como ejemplo el escándalo de la EPS Saludcoop, al precisar que en el momento en el que los colombianos pidan cuentas del dinero de la EPS “nos encontraremos que nos dejaron la estrategia de Caracol, la casa pintada. Aquí va a ser la EPS pintada porque ya los activos no están”.

Sus comentarios hacen referencia al Capítulo 1, Artículo 4, literal X en el que se define el uso de los recursos del sistema y establece el papel de los actores “con dos características que son peligrosas: “son públicos hasta que pasan a los gestores, cambiando así la destinación y uso de los mismos”.

Sobre el Parágrafo X que se refiere a la inembargabilidad, el congresista indicó que “si los recursos del sistema son inembargables y las instituciones privadas que hacen parte del sistema manejan los dineros privados, estos tendrán libre destinación y no podrán ser embargados. Esto legaliza aún más la mala utilización de los recursos”.

Para él la única solución es eliminar el artículo por completo.

Textualmente dice: “las decisiones a la autoridad judicial que contravengan lo dispuesto en la presente ley, harán incurrir al funcionario judicial que lo profiera en una falta disciplinaria gravísima y genera responsabilidad fiscal”.

Para Ospina esto es “una enjalma a la tutela porque si estoy diciendo que el juez no puede fallar en contra de la gente por los temas de salud, lo que estoy haciendo es que el juez tome decisiones sobre los mismos”.

Su comentario hace también referencia a lo estipulado en los artículos 43, 44, 45, 46 y 47.

En el artículo 12 sobre los órganos de dirección, Ospina explicó que se continuará con el tema de la unidad nacional y con la politiquería.

“Eso es nefasto, pueden haber cosas buenas en la reforma, pero con el eje central empezamos mal”, agregó.

En lo referente al artículo 14 que aborda la cobertura, Ospina cree que pese a que se habla de un 100%, “Mi Plan no garantizará la cobertura de los servicios para todas las patologías”.

En el artículo 54 y el 26, sobre el papel de las EPS, hay posiciones completamente contrarias, insistió, al tiempo que fue enfático en decir que las EPS no se acaban, solo cambian de nombre.

“Con esto están lavando las actividades y es el funcionamiento de las EPS por intermedio de una figura de una fiducia pero realmente no está cambiando la forma”, explicó Ospina.

Además, “pese a que sabemos que las EPS intervenidas ya están vendiendo los activos no se menciona en ningún lado la solución a ese pago de la cartera pendiente”.

Agregó que tampoco se acaba con la integración vertical ni la intermediación, simplemente lo maquillan.

Por ello, enfatizó en que en la actual crisis “todos tenemos un grado de responsabilidad pero sí puedo decir sin equivocarme que los que más malgastaron los recursos fueron las EPS, pero no en cabeza de ellas sino por intermedio de empresas terceras a quienes le compraban servicios que hacían retención inmoral de recursos”.

Esto se complementa con lo escrito en los artículos 58, 59 y 60 en el que “es claro que se legisla en beneficio de los intereses particulares puesto que hay varias EPS intervenidas, como Saludcoop, en la que las intervenciones son amañadas”.

En lo que respecta al artículo 34, sobre el pago a las IPS, aseguró que en realidad se generará un manejo “amañado e inequitativo” por parte de las EPS.

El espíritu del sistema es quebrantado puesto que, aseguró, no hay un proceso claro de promoción de la salud y prevención de la enfermedad, refiriéndose así a lo estipulado en los artículos 19 y 20 de la reforma.

Compromiso del Congreso

Para el presidente del Congreso, Roy Barreras, en la discusión no se está improvisando y “la ley estatutaria está lista y madura”.

No puede dejarse por fuera que no hay un énfasis en la prevención de la enfermedad. “Hay un énfasis financiero y es un buen propósito pero la atención primaria no es una cosa marginal”.

“El tema de la autonomía médica tiene que estar en el centro del debate y no lo veo tampoco como la estrategia de atención primaria”, añadió.

Indicó que “hay todo el compromiso del Congreso y de todos los partidos porque recogimos la firma de ellos, la voluntad para aprobarla”.

“No estamos en el día 0 de la reforma, el proyecto de ley estatutaria es fruto de mesas de trabajo durante más de dos años de los gremios y por lo menos ocho meses del Congreso”, afirmó.

Para Barreras. “la reforma no es perfecta pero es buena. Creo que la ley ordinaria debe tener mensaje de urgencia porque si no va a ser muy difícil garantizar que en apenas 12 semanas, tengamos una reforma a la salud”.

Puntos de concordancia

El expresidente Ernesto Samper insistió en que los primeros que tienen que ponerse de acuerdo sobre el tema de la salud son los mismos actores.

“Si no se ponen de acuerdo los que se beneficiarán con una reforma a la salud, pues no va a salir. Por eso les propuse que nos pongamos de acuerdo sobre principios básicos, qué es el derecho a la salud, cómo se puede garantizar”, afirmó.

Personalmente cree que no se debe ser “tan catastrófico”. Adujo que se llegó a niveles de cobertura que han alcanzado el 90%. “Claro que hay deficiencias, pero en términos generales no hay que aplicar una política de arrasar y comenzar de 0, sino mejorar lo que tenemos”.

Además, “si no hay un consenso previo del sector de la salud, va a ser prácticamente imposible sacar la ley”.

Piden claridad en la oferta de prestación de servicios

Al pretender encontrar un consenso general, el vocero de la Asociación Nacional de Cajas de Compensación Familiar (Asocajas), Miguel Uprimny, subrayó que las propuestas radicadas no plantean claramente la forma de prestación de servicios.

Pese a que “nuestra visión es distinta me sumo al pacto de la salud pero en ninguno de los proyectos encontré ese impulso para ver cómo desarrollamos la oferta en la prestación de los servicios específicos”.

Aseveró que como gremio han adelantado ejercicios para encontrar los diagnósticos suficientes que ilustren la reforma, y “esos consensos los podemos encontrar más fácilmente en la ley estatutaria además que tiene muchos elementos importantes”.

Pese a ello, pidió tener en cuenta que todos hablan en idiomas diferentes  como en “¿qué es salud en términos prestacionales o qué incluyen los determinantes sociales de la salud?”.

Por ello, destacó que es necesario y urgente que haya un consenso sobre cuál es la responsabilidad del sector salud en toda la cadena del sistema.

“¿Los servicios sociales harán parte de la misma? Porque eso implicaría una presupuestación distinta, y de quién es la responsabilidad de toda la gestión de determinantes de salud en educación y vivienda”, cuestionó.

En cuanto a la ley ordinaria explicó que se pueden rescatar varios elementos pero no se ha abordado, con la profundidad que ellos esperan, el tema de la oferta de prestación de servicios de salud “que se quedó corta”.

Resaltó que no importa lo que se apruebe finalmente puesto que “si no tenemos en dónde atender a las personas, no importa el esquema, si no tenemos ese sitio para que vayan, no podríamos atenderlos con satisfacción”.

 

Si es necesario, acabamos con las EPS: Acemi

En el marco del Pacto por la Salud que se realizó en Bogotá esta semana, el presidente de la Asociación Colombiana de Empresas de Medicina Integral (Acemi), Jaime Arias, hizo un llamado para que se parta de lo ya hecho en el sistema de salud y no se modifique completamente, así la decisión que incluya eliminar las Entidades Prestadoras de Salud.

Arias se mostró dispuesto a participar con la experiencia de cerca de dos décadas en el trabajo de construir el sistema de salud, como la Asociación lo ha hecho, y “estamos dispuestos a lograr lo mejor para el país, así lo mejor pase por hacer desaparecer a las EPS”.

En su opinión, estas entidades han logrado cosechar una gran cantidad de molestias y fricción en los últimos 20 años “porque cumplieron con la tarea que les puso la Ley 100, que era precisamente ser articuladores del sistema y esa pasa por una serie de controles, de chequeos y balances, de enfrentamientos con todos los demás sectores”.

Sin embargo, en el desarrollo del papel de las EPS se han desgastado “y por eso hemos llegado a una situación en la que muchos consideran que lo que se debe hacer para reformar a la salud, simplemente es desaparecer a esos actores”.

Puntos positivos

Resaltó que hay varios elementos positivos de la reforma presentada por el Ministerio de Salud, y hasta la ley estatutaria también los tiene, “incluso dije que estaba dispuesto a firmarla si le quitaban uno o dos artículos que no me gustaban, y ya se los quitaron”, dijo.

Consideró fundamental empezar el debate en qué debe darles Colombia a los ciudadanos y qué puede darles en realidad, pues “no podemos dejar de tener los pies en la tierra”.

Aclaró que el círculo principal de la iniciativa debe ser el de los pacientes, “nos preocupa que al final logremos hacer muchas cosas pero los pacientes sigan en las mismas”.

Durante su intervención le solicitó al Gobierno y al Congreso que no se modifique totalmente el sistema ya que “todos los colombianos hemos construido un sistema de salud importante que llama la atención en todo el mundo, y destruirlo de un plumazo sería una aventura muy peligrosa”.