Los jóvenes, clave de estrategia de seguridad | El Nuevo Siglo
Lunes, 27 de Julio de 2015

Una de las prioridades de la administración distrital, en materia de seguridad, son los programas de prevención del uso de los adolescentes y niños, por parte de bandas delincuenciales, para la comisión de delitos, aseveró Gloria Flórez, secretaria de Gobierno.

 

Se trata de programas que involucran el componente coercitivo, pero especialmente “donde ponemos al joven y al adolescente como víctima de las estructuras mafiosas”, ratigó la funcionaria

Expresó que “actualmente 7.700 jóvenes y adolescentes, mayores de 16 años, se están beneficiando del programa 'Jóvenes en Paz', donde tienen oportunidades de trabajo y de estudio”.

 

Añadió que “la Bogotá Humana viene trabajando en la 'Mesa Distrital del Sistema Penal Adolescente', junto con con la Procuraduría de la Nación, la Personería distrital, la Defensoría del Pueblo, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar -ICBF- y las demás entidades distritales involucradas en el tema, a fin de encontrar  soluciones a las necesidades de los jóvenes infractores.

 

Dijo que la alcaldía mayor, a través de la Secretaría de Gobierno, firmó un convenio con Naciones Unidas para lanzar un modelo de justicia restaurativa, el cual va a ser muy importante, no solo para las necesidades de la capital, sino que va a marcar una pauta a nivel nacional.

“Debemos combinar diversas estrategias para responder al problema de incorporación de niños y jóvenes a las redes de microtráfico y delincuencia, en general, teniendo en cuenta que es una situación que se ha incrementado en Bogotá y todas las capitales de departamento”, señaló la secretaria.

Aseguró que “la respuesta debe ser integral, por parte del Estado, y que incluya un trabajo especial con las familias, con los niños en los colegios”.

Resaltó las campañas dirigidas a jóvenes, niños y adolescentes para combatir situaciones de violencia, consumo de sustancias y trata de personas.

 

Puntualizó que la Policía Metropolitana ha actuado de manera contundente frente al crimen, lo que ha permitido reducir, de manera importante, la problemática en Transmilenio y el SITP, con políticas definidas.