La semana pasada, cuando Gustavo Petro anunció que no otorgará la licitación para construir la primera línea del Metro, la presión política por el proyecto que más esperan los bogotanos disminuyó.

En efecto, a pesar que la capital del país nunca había estado tan cerca de concretar una solución de transporte pesado para menguar los trancones, en siete meses se conocerá cómo será la estructuración financiera y legal.

En medio de la firma del convenio con la Financiera de Desarrollo Nacional para la estructuración integral del metro de Bogotá, el mandatario reconoció que en su gobierno que finaliza el 31 de diciembre de 2015 se dejarán los términos de la licitación colgados en las páginas WEB del Distrito Capital.

Mientras el otorgamiento de la licitación estaría para el segundo semestre de 2016, el alcalde anunció la firma de un convenio interadministrativo entre la Financiera de Desarrollo Nacional (FDN), el Instituto de Desarrollo Urbano (IDU), y la Empresa de Energía de Bogotá EEB, para el desarrollo del proceso de estructuración financiera del metro de Bogotá.

En este proceso, que durará siete meses, se realizarán estudios de suelo y de financiación del proyecto Metro de Bogotá, con el fin de delimitar los términos de referencia de la licitación para la construcción del sistema de transporte masivo.

El alcalde Petro destacó la labor del Ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas y del Gobierno Nacional, los que dieron el aval para firmar el convenio con la FN mediante una misiva. “Ha sido determinante la participación del Gobierno nacional para que este proyecto salga adelante”.

Entonces se firmaron dos convenios y una carta de intención para la estructuración integral del megaproyecto, cuyo producto final será el contrato para la construcción de la Primera Línea del Metro de Bogotá que hasta el momento tendría un costo de 15.2 billones de pesos.

El mandatario ratificó que las fuentes de financiación de la primera línea estarán plasmadas en el documento Conpes y donde la nación aportará 6 billones de pesos y el Distrito Capital 2.2 billones; las tarifas de los usuarios, y la gestión de suelo.

Al tiempo que la primera línea arrancaría en los patios del Tintal para finalizar en la Calle 127, el primer convenio firmado ayer, cuyo objeto es realizar la estructuración integral del proyecto Metro de Bogotá, por un valor de 7.650 millones de pesos, lo suscribió el presidente de la Financiera de Desarrollo Nacional (FDN), Clemente del Valle y el director del Instituto de Desarrollo Urbano (IDU), William Camargo.

Entonces el IDU entrega los estudios y diseños de ingeniería básica avanzada de la Primera Línea del Metro y da paso a la fase de estructuración técnica, legal y financiera donde el liderazgo estará en la EEB y la FDN, por Distrito y Nación, apoyados por un equipo interdisciplinario de profesionales de Transmilenio para la construcción del modelo concesionario y definición de la tarifa técnica del metro; de la Secretaria de Hacienda para la estructuración financiera.

La primera línea del metro estaría rodando a finales de 2020 si se cumplen los cronogramas./ENS.