Emelec de Ecuador venció por 2-1 (1-1) a Fluminense de Brasil en el cotejo de ida que disputaron el jueves en Guayaquil, por la llave F de los octavos de final de la Copa Libertadores de América-2013, en el cual hubo un autogol y un tanto de penal para los anfitriones.

Los goles fueron convertidos para Emelec por el brasileño Leandro Euzébio (32 minutos, autogol) y Fernando Gaibor (87, de penal), y para el 'Flu' por Wagner (44).

El subcampeón del balompié ecuatoriano, que está con un pie en los cuartos de final de la lid, puso a correr la pizarra a los 32 minutos, en que el defensa Leandro Euzébio hizo el tanto en contra al intentar rechazar un centro de Carlos Vera que mandó desde el costado derecho.

El zaguero ecuatoriano se proyectó con velocidad para alcanzar un servicio originado del otro lado y mandar el esférico hacia el centro de la portería, apareciendo Leandro Euzébio para hacer el autogol al tratar de despejar el peligro con una chilena.

Pero Flu tardó doce minutos para empatar 1-1 con un golazo de Wagner, quien de media distancia y con el botín izquierdo conectó un misilazo cruzado para anidar en la valla 'eléctrica'.

Wagner gatilló sin titubear un pase de Carlinhos, que casi sobre la última línea prefirió retroceder el balón para la jugada que terminó postrando al cuidapalos argentino Esteban Dreer.

El 'eléctrico' Gaibor, que ingresó al minuto 78 en reemplazó de Eddy Corozo, dio la victoria 2-1 a su equipo a al minuto 87 mediante un penal que cobró a ras del césped y hacia la izquierda del cancerbero Diego Cavalieri.

La pena máxima fue sentenciada ante una falta de Carlinhos sobre el ariete argentino Marcos Mondaini.

A los 24, Wagner ya dio un firme aviso de querer encajar al cobrar un tiro libre que Dreer pudo desviar con angustia, de tal manera que la pelota chocó en el vertical diestro antes de salir.

A los 43, el mediocampista Wellington Nem también advirtió sobre la intención del tricolor de salir airoso del Capwell, al que asistieron unas 18.000 personas, al aprovechar una confusión de los azules para rematar con potencia aunque sin buscar un hueco, pues el guardameta 'millonario' pudo contener la pelota.

Ansiosos por el triunfo, ambos elencos saltaron como si fueran ciclones a la cancha del estadio George Capwell, de propiedad de los emelecistas, para atacarse sin contemplaciones y crear continuo malestar en los arcos rivales.

Sin embargo, el once carioca -cuyo mayor logro en la Libertadores es el subtítulo de la edición de 2008- hizo un mejor papel en el compromiso, que fue dirigido por el árbitro colombiano Wilmer Roldán, apoyado en los costados por los cafeteros Eduardo Díaz y Wilson Berrío.

Con coraje y siendo Dreer un baluarte en la cabaña de Emelec, el Flu estuvo cerca de alzarse con un valioso punto a la espera del desquite en Rio de Janeiro.

La revancha se escenificará el próximo miércoles.

El ganador de la llave enfrentará en los cuartos de final al triunfador de la serie C, integrada por el argentino Tigre y el paraguayo Olimpia.

Haciendo de local, el 30 de abril, Tigre derrotó por 2-1 y visitará a Olimpia el 16 de mayo.

En la segunda fase del torneo, Emelec quedó segundo en el Grupo 4 con 10 puntos en seis partidos (detrás del argentino Vélez Sarsfield, con 13), mientras que Fluminense ganó el 8 con 11 unidades (perseguido del también brasileño Gremio y del chileno Huachipato, los dos con 8)./AFP