El presidente uruguayo José Mujica dijo que las negociaciones para que lleguen a Uruguay reclusos de Guantánamo "están lejos de estar cerradas" y señaló que a cambio de aceptar la solicitud de Estados Unidos le pidió a Washington que libere a "dos o tres" prisioneros cubanos.
"Dijimos que pediríamos algo" a cambio de recibir a prisioneros de Guantánamo en Uruguay, dijo Mujica en su audición radial "Habla el presidente".
"No hacemos esto por plata o cuestiones materiales, pero no tenemos empacho en decir que le pedimos por favor al gobierno norteamericano que haga lo posible para que esos dos o tres prisioneros cubanos que hace muchos años que están allí, se les busque la manera de liberarlos, porque eso también es una vergüenza", sostuvo el mandatario.
Mujica había anunciado el jueves que Uruguay recibirá prisioneros de la cárcel de Guantánamo en calidad de refugiados, luego que el semanario Búsqueda informara que el país sudamericano albergará a cinco presos durante al menos dos años.
El viernes el presidente subrayó de todas formas que las negociaciones con el gobierno estadounidense "están hoy lejos de estar cerradas".
"Dependen, entre otras cosas, de diversas decisiones fuera de nuestro alcance", indicó.
Mujica aclaró además que quienes vengan "serán hombres libres en nuestra realidad y ese asunto de no salir del país por dos años no sería otra cosa que un gesto voluntario de ellos para lograr salir de esa vergüenza y nunca una imposición nuestra".
"Jamás aceptaríamos ser carceleros de nadie, tampoco avalamos la juridicidad de la cárcel de Guantánamo, pero no nos podemos desentender ante la formidable tragedia de la gente", aseguró.
De esta manera, "ganamos un poquito de autoridad moral para decirle a los más poderosos: sean un poco menos orgullosos, menos impositivos. Por eso pienso que si estas gestiones culminan, Uruguay debe sentirse servidor, como otros países, en una causa que es cerrar una vergüenza de la humanidad" porque "abundaron los presos sin proceso" en Guantánamo, indicó.