América Latina sufre una "crisis de ahorro", tanto de particulares como de los gobiernos, advirtió un reporte del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), lanzado este martes en Santiago.
La tasa de ahorro nacional de los países de América Latina fue de sólo el 17,5% del PIB entre 1980 y 2014, casi la mitad de lo registrado en las economías emergentes en Asia, de acuerdo al informe "Ahorrar para desarrollarse: cómo América Latina pueden ahorra más y mejor".
El texto analiza los motivos del "bajo nivel de ahorro crónico registrado por particulares y gobiernos de la región" y advierte que la carencia de ahorro le impide a la región alcanzar mayores niveles de crecimiento económico.
Por ejemplo, por cada punto porcentual (PP) adicional de ahorro nacional la inversión interna crece en casi 0,4 pp. "Esto equivale a 20.000 millones de dólares adicionales disponibles para financiar cruciales proyectos de infraestructura u otras inversiones", advierte el BID.
"La crisis de ahorro implica que la región encuentra dificultades para dar con los recursos necesarios para construir aeropuertos, rutas y otras obras de infraestructura imprescindibles para impulsar el crecimiento", ejemplifica el reporte.
Algunas carencias detectadas están en el sistema bancario, que ofrece alrededor del 30% del PIB en préstanos al sector privado, "muy por debajo de los sistemas bancarios de la OCDE o de las economías emergentes de Asia".
Lo anterior "es una manifestación del poco ahorro que se canaliza a través del sistema financiero formal" en la región, donde solo el 16% de los adultos registra ahorros en bancos, destaca el BID.
Los sistemas de pensión son también otra restricción para los ahorros, de acuerdo reporte, que señala que menos de la mitad de la población de América Latina ahorra para su jubilación a través de un sistema de pensión contributiva.
Finalmente las políticas fiscales también tienen también un impacto sobre el ahorro, ya que el "el gasto púbico es demasiado elevado en subsidios y demasiado bajo en inversiones de capital.