Informe económico.
Uno de los problemas más importantes que se presentan en los países es el abismo en los ingresos de la población. Un análisis del presidente de Fasecolda Roberto Junguito indica que en el libro ¿Por qué fallan las Naciones?, los destacados profesores Daron Acemeglu –del Instituto Tecnológico de Massachusetts, MIT- y James Robinson -de la Universidad de Harvard-, quien también enseña en la Escuela de Verano de la Universidad de los Andes, adelantan un profundo análisis histórico sobre las grandes diferencias de ingreso actuales entre los países más avanzados y los pobres, y los motivos que han conducido a estas brechas.
Dice el directivo que los autores descartan las hipótesis de tipo geográfico, cultural y de ignorancia o mal manejo por parte de los gobernantes que se han dado en la literatura para explicar tales diferencias y argumentan, convincentemente, que lo que ha llevado a unas naciones a prosperar de manera sostenida y a otras a fracasar han sido, en esencia, sus instituciones.
Sostienen que los países que han fallado o fracasado son aquellos que han establecido instituciones que denominan como “extractivas” o que favorecen a los grupos selectos de la sociedad, frente a las catalogadas como “inclusivas” y que corresponden a organizaciones y políticas que estimulan la educación, el cambio tecnológico y el bienestar, mediante la participación de toda la población.
Señala Junguito que los autores contrastan las instituciones coloniales españolas impuestas en los países de América Latina, como por ejemplo las mitas para la explotación de las minas.
Indica el presidente de Fasecolda que Colombia, en el ámbito de América Latina tiene buena reputación por su manejo económico responsable y ortodoxo, el cual se atribuye al respeto por la ley y a los derechos de propiedad, así como a nuestro profundo sentido de cumplir con las obligaciones financieras y al establecimiento de instituciones claves para el manejo económico, como lo es un banco central independiente.
No obstante, cabe reflexionar sobre el carácter de nuestras instituciones y sobre los cambios que deben adelantarse. Lo primero que se debe analizar son las instituciones fiscales, las cuales no parecen estar beneficiando a la sociedad en general, pues se ha comprobado que la estructura fiscal no es progresiva y que el gasto fiscal favorece a unos pocos.
Otra área donde se están adelantando reformas más “inclusivas” se refiere al acceso a la tierra mediante la puesta en marcha de la Ley de Restitución de Tierras. Asimismo, el Gobierno ha anunciado su interés por llevar a cabo una reforma pensional que permita que todos los colombianos, y no un selecto grupo, puedan contar con ingresos a su edad de retiro.