Mientras siguen muriendo personas, la UE saluda la creación de un bloque opositor y pide de nuevo la renuncia del presidente Bashar al Asad.
La UE, que se dispone a reforzar las sanciones contra el régimen, "saluda los esfuerzos de la población siria para establecer una plataforma unida y llama a la comunidad internacional a hacer lo propio".
La creación del Consejo Nacional Sirio (CNS), que agrupa a la mayoría de las corrientes de oposición, constituye a ojos de la UE, "un paso positivo", según un borrador que será aprobado por los ministros de Relaciones Exteriores.
Los europeos se felicitan de la determinación del CNS a defender la no violencia y los "valores democráticos", y reiteran la necesidad de que el presidente deje el poder "para permitir la transición".
Entre tanto, los miembros del CNS buscan el respaldo de los países árabes, y contactos a nivel internacional.
Alrededor de 90 representantes de varios grupos opositores, incluidos los miembros del CNS y su responsable provisional Burhan Ghaliun, se reunieron en Suecia durante el fin de semana.
Reclamaron unánimemente el envío de observadores internacionales a Siria pero en general se opusieron a una intervención militar extranjera, declaró este lunes el centro Olof Palme, organizador del encuentro.
Creado oficialmente el 2 de octubre en Estambul, el CNS agrupa por primera vez a todas las corrientes políticas e integra en sus filas a los Comités Locales de Coordinación (LCC), que organizan las manifestaciones en el terreno, los liberales, la cofradía de los Hermanos Musulmanes, prohibida desde hace tiempo en Siria, así como a partidos kurdos y asirios.
Opositores sirios, como el escritor Michel Kilo, se reunirán el martes en París.
En Moscú, el representante del Kremlin para las crisis en el mundo árabe, Mijaíl Marguelov, recibió este lunes a una delegación liderada por un jefe del partido comunista, Qadri Jamil, acusada por algunos opositores de ser afín al régimen de Al Asad.
"Estamos dispuestos a organizar una mesa redonda para que los representantes de la oposición y del poder puedan ponerse de acuerdo, en Moscú o en otra parte", declaró Marguelov.
Rusia, aliada de Damasco, dice estar dispuesta a proponer al Consejo de Seguridad de la ONU, junto con China, un proyecto de resolución "más equilibrado" que el de la semana pasada, vetado por estos dos países.
Sobre el terreno, un civil murió en Homs (centro) durante el bombardeo del barrio de Bab Sebaa, y unos desconocidos mataron a un miembro del partido Baas (en el poder en Siria) en la región de Idleb (noroeste). Además un hombre de 35 años perdió la vida cuando intentaba cruzar la frontera con Turquía, anunció este lunes el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH).
La misma fuente dio cuenta de 31 víctimas el domingo (14 civiles y 17 soldados y miembros de las fuerzas de seguridad).
"El domingo hubo un clima de guerra en Homs (centro), donde se escuchaban explosiones en todas partes en medio de disparos de ametralladoras pesadas. Muchas casas quedaron destruidas. Nueve personas resultaron muertas y hay decenas de heridos", afirmaron los LCC.
Más de 2.900 personas murieron en Siria desde el comienzo del movimiento de contestación a mediados de marzo, según la ONU.
Por otro lado el gran mufti de Siria, Ahmad Badredin Hasun, principal autoridad religiosa, amenazó a Europa, a Estados Unidos y a Israel con atentados suicidas si atacan al país.
"En cuanto se dispare el primer obús, los hijos de Siria y de Líbano se convertirán en combatientes que cometerán atentados suicidas", declaró el mufti en un discurso consultable en YouTube.
AFP