La UE decide sobre el glifosato | El Nuevo Siglo
Viernes, 27 de Mayo de 2016

La Unión Europea (UE) volverá a reunirse el 6 de junio para definir el futuro del glifosato, cuya autorización de uso por 9 años está bloqueada por las dudas sobre sus consecuencias en la salud humana, indicaron diferentes fuentes a la AFP.

 

Esta será el tercer intento de la UE para definir el futuro en el bloque de esta sustancia activa utilizada en los herbicidas.

 

La semana pasada la Comisión Europea, que proponía renovar la autorización por 9 años, desistió de someter a voto su propuesta ante la indefinición de los Estados miembros.

Lo mismo sucedió en marzo, cuando proponía renovar la autorización por 15 años.

El comité de expertos que debe decidir del futuro del glifosato, ampliamente utilizado por la industria agrícola, compuesto por representantes de los 28 países de la UE, volverá a reunirse el 6 se junio.

 

La autorización del glifosato vence el 30 de junio. Si los Estados miembros no llegan a un acuerdo su uso quedaría prohibido en toda la UE.

Ante el bloqueo de la situación y de cara a la reunión del 6 de junio, la Comisión podría proponer una "prolongación técnica" de al menos un año o hasta fines de 2017, indicaron varias fuentes europeas, esto es hasta después de las elecciones presidenciales en Francia (en mayo) y las federales en Alemania (septiembre).

Este plazo permitiría a la ECHA (la Agencia Europea de Sustancias y Mezclas Químicas) publicar nuevos estudios sobre los impactos del glifosato en la salud humana.

Francia insiste en que no puede decidir la autorización antes de que la ECHA publique nuevos estudios.

Alemania en tanto no se posicionó en las últimas reuniones.

Los estudios sobre las consecuencias del glifosato difieren. La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) juzgó como "improbable" que el glifosato fuera cancerígeno.

Una opinión aplaudida por la industria agroquímica, pero en contradicción con la emitida antes por la Agencia Internacional de Investigación sobre el Cáncer (IARC, por su siglas en inglés), de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que calificó al glifosato, presente entre otros en el Roundup de Monsanto, uno de los herbicidas más vendidos en el mundo, de cancerígeno "probable para el hombre".

 

Un reciente estudio conjunto de la OMS y de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), estima por su parte como "poco probable" que el glifosato sea cancerígeno "en los humanos expuestos a través de la alimentación".

El uso de herbicidas que contienen glifosato se generalizó rápidamente desde que salió al mercado en la década de 1970. Con el desarrollo de cultivos transgénicos resistentes a esa sustancia, como la soja RR (Roundup Ready) de Monsanto, su uso se generalizó aún más.