El Alto Comisionado para la Paz, Sergio Jaramillo Caro, aseguró que no se puede permitir que la política esté por encima de la paz y que en la medida en que se siga avanzando, los opositores del proceso se convertirán en partícipes constructivos de la transición hacia la paz.
Durante la conferencia "Acuerdos y construcción de paz en Colombia" en el Blavatnik School of Government en la Universidad de Oxford, Inglaterra, Jaramillo Caro se refirió a los pilares de los diálogos de La Habana: poner fin al conflicto como un paso para la construcción de la paz, una metodología rigurosa, un modelo de construcción de paz enfocado en el territorio y las víctimas como centro del Acuerdo General.
"Hay una diferencia entre la idea de ponerle fin al conflicto y la paz en general. La paz es algo que debemos lograr en Colombia, con la gente, en las regiones; no puede ser lograda en La Habana. Esto no se trata solo de ponerle fin al conflicto con las Farc, sino de ponerle fin a una historia de violencia política. Por eso el concepto clave es la no repetición", señaló Jaramillo Caro sobre la concepción del proceso de conversaciones.
Respecto a las visitas de las cinco delegaciones de víctimas a La Habana aseguró que fue una experiencia impactante y poderosa.
"No sólo por lo que se dijo y las historias que contaron durante las visitas", sino también porque nos recordaron porque estábamos sentados en la Mesa de conversaciones desde el primer momento", sostuvo.
Finalmente, Jaramillo Caro explicó los grandes desafíos de las conversaciones para terminar el conflicto, especialmente en los temas de seguridad, justicia y movilización de los ciudadanos en torno a un nuevo pacto social, y la implementación de lo acordado.
"Se debe crear una visión que movilice a la población alrededor de estos objetivos, explicar que esto implica sacrificios de todos, pero que al final es por un mejor futuro para todos; y que es un gana-gana para todos en los territorios", puntualizó.