La paz, bandera electoral. | El Nuevo Siglo
Lunes, 31 de Marzo de 2014

Por William Calderón

La gran preocupación de los asesores de los candidatos es que la paz sea una bandera electoral, porque las Farc están imponiendo el ritmo. El golpe más duro lo dieron hace quince días con el asesinato de dos policías, a quienes secuestraron, torturaron y luego los degollaron en estado de indefensión. La posterior declaración del terrorista alias Marcos Calarcá, en el sentido de que no solo dos policías han muerto en esta confrontación, desató la ira de los colombianos, quienes castigaron al presidente Santos en la última encuesta con un 27% de favorabilidad en la primera vuelta y un 34% en la segunda, frente a un 42% de Enrique Peñalosa.

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El voto de opinión decide.

Aunque el partido de La U fue el ganador de las elecciones parlamentarias, hasta el momento así aparece, no hay certidumbre de que las maquinarias vayan a ser decisivas en las presidenciales. La mayor preocupación de los jefes de los partidos de la Unidad Nacional, La U, el Liberal y Cambio Radical, es que el voto de opinión puede acercarse a un 40%, lo cual será definitivo para determinar quién se quedará en la Casa de Nariño, si el presidente Santos se reelige o si tendrá que cederle el solio a un sucesor. Y claro, este voto de opinión va amarrado obligatoriamente al tema de la paz y a la escandalera sobre todo lo que dicen de la supuesta desmotivación de las Fuerzas Militares por las negociaciones de La Habana. Lo que era un secreto a voces ya ha saltado a los medios de comunicación. Y el Gobierno ha sentido el castigo de opinión.

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La oposición de Uribe. Con 20 senadores y 19 representantes, el expresidente Uribe llegará al Congreso de la República a marcarle oposición al presidente Santos, si este sale reelegido para cuatro años más. Desde luego que la gran expectativa se centra en la forma como Uribe manejará su bancada y el estilo de oposición que tratará de imponer. Se sabe que desde ya tiene a sus elegidos estudiando las diferentes propuestas que lanzó en la campaña parlamentaria, para convertir esos discursos en proyectos de ley. Y como Uribe ha dicho que buscará corregir los errores que cometió en sus dos presidencias, no se sabe cómo hará para que el Congreso le marche a sus propósitos. Con 20 senadores, Centro Democrático sigue siendo minoría en el Senado, donde encontrará una oposición cerrada a todo lo que lance, comenzando por el Polo cuyos voceros son enemigos a muerte. Tal vez se cumpla entonces una predicción del expresidente César Gaviria, quien afirmó mucho antes de las elecciones parlamentarias que la oposición de Uribe será únicamente de discursos. Ahí está el Polo. Jorge Robledo recibe el premio mayor en las urnas cada año con la mayor votación. Un reconocimiento merecido, pero no pasa de ahí… ¿Será que Centro Democrático va a recorrer el mismo camino del Polo?