La inflación y las tasas de interés | El Nuevo Siglo
Sábado, 10 de Noviembre de 2012

En el informe de inflación dado a conocer ayer por el Banco de la República, se señala que las expectativas de inflación a un año, que resultan de la encuesta aplicada a analistas, se redujeron desde 3,37 por ciento en julio a 3,23 por ciento en octubre. Las derivadas de los papeles de deuda pública con plazos a 2, 3 y 5 años se incrementaron ligeramente y se situaron en tasas cercanas al 3 por ciento.

Indica el Emisor que en septiembre la inflación anual fue de 3,08 por ciento, cifra inferior que el resultado de junio (3,2 por ciento) y cercana al punto medio del rango meta (3 por ciento). Este comportamiento se explicó por el menor ajuste anual en los precios de los alimentos, grupo cuyo incremento pasó de 4,2 por ciento en junio a 3,6 por ciento en septiembre.

El IPC sin alimentos y las otras medidas de inflación básica aumentaron en promedio 3,16 por ciento anual en septiembre. Dentro del IPC sin alimentos, los transables se mantuvieron relativamente estables y se incrementaron 1,09 por ciento anual en septiembre. En el trimestre pasado los no transables se aceleraron desde 3,62 por ciento a 4,02 por ciento. Dentro de este último grupo, el IPC de arriendos completó más de un año con variaciones anuales crecientes y cercanas al techo del rango meta. Por su parte, los precios de los bienes y servicios regulados aumentaron anualmente 3,63 por ciento en septiembre, siendo el único grupo que se desaceleró debido a los menores ajustes de la energía y del gas.

El comportamiento de los precios reseñado anteriormente muestra una inflación anual observada y sus expectativas y proyecciones cercanas a la meta de largo plazo (3 por ciento). Ello junto a una economía que se ha desacelerado desde un punto en el cual el gasto agregado ya superaba la capacidad productiva de la economía. Los precios de la vivienda continúan aumentando a tasas altas y el crédito se ha desacelerado pero continúa creciendo a buen ritmo.

Explica el Banco Central que el mayor riesgo sobre la actividad económica del país continúa siendo una fuerte recesión en Europa, aunque al parecer su probabilidad de ocurrencia ha disminuido, dadas las acciones de las autoridades europeas y las reacciones de los mercados en ese continente. Existe además en lo que resta del año un riesgo asociado a la postura fiscal en los Estados Unidos y que depende de decisiones del congreso de ese país.

De acuerdo con la evaluación del balance de estos riesgos, en agosto la Junta Directiva redujo la tasa de interés de referencia en 25 puntos básicos y la situó en 4,75 por ciento. En las reuniones de septiembre y octubre decidió no modificarla.