Sábado, 12 de Noviembre de 2011
A TRÁMITE contrarreloj pasó el proyecto que pretende elevar a la categoría de derecho fundamental el acceso a Internet.
El 19 de octubre la plenaria del Senado aprobó en segundo debate la iniciativa, acercándose cada vez más a convertir en una realidad que todos los colombianos tengan garantizado el ingreso a la red.
Se trata del proyecto de Acto Legislativo 05 de 2011 Senado, “por el cual se constituye el acceso a Internet como derecho fundamental, se modifica el artículo 20 de la Constitución Política y se dictan otras disposiciones”, que fue radicado el 26 de julio por el senador santandereano Honorio Galvis, del Partido Liberal, con el apoyo del presidente de la Cámara Simón Gaviria y el senador Guillermo García, ambos del mismo Partido Liberal, así como por los senadores Jorge Hernando Pedraza y Gabriel Ignacio Zapata, del Partido Conservador; Jorge Eliécer Guevara, del Polo Democrático; Carlos Alberto Baena, del Movimiento Independiente de Renovación Absoluta (Mira) y Juan Carlos Restrepo, de Cambio Radical.
De acuerdo con la exposición de motivos, el articulado busca garantizar a toda persona la libertad de difundir y expresar su pensamiento y opiniones, la de informar y recibir información veraz e imparcial, la de acceder efectivamente a Internet, y la de fundar medios masivos de comunicación.
El senador Galvis explicó que el acceso a Internet es considerado como un medio esencial para el desarrollo de la humanidad, pues permite que los individuos obtengan y hagan circular información, hagan valer sus derechos y participen en debates públicos relacionados con cambios sociales, económicos y políticos.
De este modo, manifestó, se logran materializar derechos y libertades, entre los que se resaltan la libertad de expresar y difundir opiniones, el libre desarrollo de la personalidad y la libertad de conciencia.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU), en un pronunciamiento reciente, catalogó el acceso a la Internet con el estatus de derecho humano fundamental, amparando de esta manera el derecho a la libertad de opinión y expresión, garantizado en la Declaración de Derechos Humanos y el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos. La ONU considera que debería ser un derecho universal de fácil acceso para cualquier individuo y, en ese sentido, exhorta a los gobiernos a facilitar su acceso.
Con el fin de garantizar el acceso a Internet, el proyecto de Acto Legislativo modificaría el artículo 20 de la Constitución Política para elevar a derecho fundamental el acceso a Internet. Desde que fue presentado el proyecto hasta el momento, las ponencias y los debates han ido enriqueciendo sustancialmente la iniciativa, abordando cuestiones fundamentales como la de otorgar al Gobierno nacional responsabilidad de apropiar los recursos y los mecanismos necesarios para la efectividad de este derecho.
El alcance va más allá de pensar en computadores en hogares. La apuesta es garantizar el acceso a la Internet a través de centros comunitarios, edificios del Estado, bibliotecas y otros puntos de acceso público. A trabajar en la educación sobre su uso, así como facilitar el acceso para las personas con discapacidad y las menos favorecidas.
Si es aprobado este proyecto, Colombia se ubicará entre los primeros países en considerar el acceso a la Internet como derecho fundamental, tal como lo han venido desarrollando otros sistemas jurídicos, entre los que se destacan Finlandia, Estonia, Francia, Grecia y en América Latina, Perú y Costa Rica.
En un mundo globalizado, donde los problemas dejaron de ser estrictamente domésticos, las noticias y toda clase de información fluyen de un lado a otro por medio de Internet.
Desde diferentes rincones del planeta los ciudadanos acceden a información en tiempo real y esto les permite tomar decisiones e interactuar desde donde se encuentren, volviendo más democrático el acceso a la información y ampliando y enriqueciendo los espacios de debate.
En ese sentido, garantizar el acceso a Internet pasa a ser un mecanismo esencial para fortalecer la democracia. Así la información estará al alcance de todos, apostando por una mayor inclusión sembrando las bases para una sociedad cada vez menos fragmentada.