LA BARCA DE CALDERON | El Nuevo Siglo
Martes, 11 de Septiembre de 2012

Preocupaciones. El ex presidente Andrés Pastrana es quizás el colombiano que en los últimos tiempos pudo evidenciar más de cerca la estructura, las normas de conducta y los órganos de decisión de la guerrilla, toda vez que durante su Gobierno fue la última ocasión en la que el Estado se sentó a conversar con la insurgencia en procura de una salida política al conflicto. Con este bagaje de conocimientos, el ex mandatario le concedió el domingo una entrevista a la periodista Cecilia Orozco Tascón, en la que planteó sus principales preocupaciones sobre el intento de paz que ahora emprende el gobierno del presidente Santos.

 

Cese al fuego. Considera Pastrana que "un cese al fuego propiciaría el clima de tranquilidad deseable para el avance rápido de la negociación". Le reconoció a la entrevistadora de El Espectador que fue un error el despeje de cinco municipios en su Gobierno. Advirtió que como la negociación se hizo en el país, fue necesario un lugar para conversar, al tiempo que este nuevo proceso (el de Santos) tendrá tres despejes: Venezuela, Noruega y Cuba.

 

Interrogantes. El ex presidente conservador se preguntó en el amplio diálogo "si en este nuevo esfuerzo están las Farc comprometidas en su totalidad con este proceso". Señala que "no puede ser que un grupo asegura que va a hacer la paz y el otro prosigue en el negocio de las armas y el narcotráfico"... Y vuelve a preguntar: ¿Qué pasa con Joaquín Gómez? ¿Por qué no aparece en los inicios del proceso si él es uno de los hombres más importantes de las Farc y maneja un frente militar muy fuerte en el Putumayo, que está absolutamente comprometido con el narcotráfico?

 

Unas lecciones. Si bien el esfuerzo de paz celebrado en el Caguán en el gobierno Pastrana no prosperó, dejó estas lecciones que es preciso considerar: 1) Deslegitimó a la guerrilla internacionalmente. 2) El proceso puso de relieve los desmanes de la guerrilla en la zona de distensión, dejando claro que la subversión estaba más cerca de continuar en el delito, en las armas, en el secuestro y en el narcotráfico, que de pasar a la civilidad.

 

El No a Chávez. El proceso del Caguán obtuvo todo el apoyo internacional, pero el Gobierno nunca perdió el control de las decisiones en el tema de la negociación. Aunque el presidente Chávez siempre quiso intervenir, el gobierno de Pastrana no se lo permitió. Cuando Chávez pidió ser invitado al Caguán, Pastrana lo eludió.

 

El Plan colombiano. El Plan Colombia fue la estrategia simultánea mediante la cual se previó que, ante un eventual fracaso, la Fuerza Pública estaría preparada presupuestal y tecnológicamente con mayor capacidad logística, todo se hizo de la mano o en compañía del entonces ministro de Defensa Rodrigo Lloreda Caicedo, lo que posibilitó el fortalecimiento del Ejército, que sirvió de base a la política de seguridad democrática implementada posteriormente por el gobierno del presidente Álvaro Uribe.