El 25 y 26 de agosto, la Unidad Móvil de Atención y Reparación a Víctimas llegó al municipio de Puerto Lleras (Meta), para que centenares de personas que sufrieron las consecuencias de la violencia paramilitar y guerrillera tuvieran acceso a la justicia y pudieran conocer los mecanismos que el Gobierno Nacional tiene disponibles para su reparación.
Los casos registrados se refieren a hechos ocurridos desde 1997, y tienen relación en su mayoría con desplazamientos forzados, homicidios, desapariciones forzadas, amenazas, entre otras. Durante la jornada, los funcionarios dela Unidad, estrategia liderada por el Ministerio de Justicia y del Derecho, brindaron orientación a las víctimas y atención sicosocial.
Con apoyo de la Personería, la Defensoría del Pueblo y la Procuraduría se adelantaron las diferentes estrategias en materia de atención. También se tuvo acompañamiento y apoyo de las autoridades locales. La población también tuvo acceso a orientaciones sobre mecanismos de justicia transicional, rutas de atención, medidas de reparación y charlas informativas sobre Ley de Víctimas y Restitución de Tierras.
La Unidad de Atención a Víctimas prendió motores el 17 de agosto de 2012 y ya ha recorrido 31.631 kilómetros. A la fecha ha atendido más de 28.000 víctimas del conflicto. Su ruta continua en septiembre por el departamento de Casanare donde ya visitó el municipio de Recetor atendiendo 228 víctimas y continuará en los próximos días en las poblaciones de Pore, Paz de Ariporo y Hato Corozal.
La Unidad Móvil de Atención y Orientación a Víctimas del Conflicto Armado es un proyecto del Ministerio de Justicia en alianza con la Defensoría del Pueblo, la Unidad de Víctimas y con el apoyo de la cooperación internacional. Esta iniciativa busca garantizar el acceso de las víctimas del conflicto armado a sus derechos y a las medidas de reparación integral.