Italia disputará la final de la Euro ante España | El Nuevo Siglo
Jueves, 28 de Junio de 2012

Con un doblete del cuestionado atacante Mario Balotelli, Italia pasó a la final de la Eurocopa al vencer 2-1 a la favorita Alemania, el jueves en Varsovia, donde ratificó su supremacía histórica ante los alemanes, antes de definir el título con España el domingo en Kiev.

La Nazionale de Cesare Prandelli se impuso con un cabezazo de Balotelli (20), tras centro desde la izquierda de Antonio Cassano, y un bombazo del punta del Manchester City (36) después de un pase desde mitad de cancha de Riccardo Montolivo que paró 'Balo' con destreza y luego fusiló a Manuel Neuer.

El volante Mesut Özil descontó a los 90+2 de penal, tras una mano de Federico Balzaretti.

La Mannschaft de Joachim Löw esperaba cortar una racha nefasta contra la Azzurra, a la que jamás derrotó en partidos oficiales de grandes citas, con la final del Mundial-1982 (3-1) como principal espina pero también dos semifinales mundialistas, especialmente la de 2006, que sufrió parte de este mismo plantel (2-0).

El domingo en Kiev, Italia intentará quebrar la "dictadura" del fútbol español que la misma Squadra Azzurra creó, al perder en cuartos de final del Europeo de 2008 por penales en Viena y dar alas a una selección que siempre amenazaba pero nunca ganaba títulos.

Desde aquel triunfo, la Roja se agrandó y logró un doblete Eurocopa-Mundial, por lo que Andrea Pirlo y compañía buscarán impedir el histórico triplete que puede conseguir España, aún lejos de sus cuatro coronas mundiales y una europea (1968).

El partido tendrá un antecedente reciente, el empate 1-1 en el debut de ambos equipos en el grupo C, que ganaron los españoles. La paradoja es que España tuvo el destino de Italia en sus manos, pues un empate 2-2 ante Croacia (victoria 1-0) en la última fecha liguera hubiera eliminado a los transalpinos.

Hasta la final, Italia llegó de menos a más, tras aquel estreno alentador contra la Roja, luego otro empate 1-1 ante Croacia y un triunfo 2-0 frente a Irlanda. En cuartos se impuso por penales (4-2 tras 0-0) a Inglaterra.

En cambio, Alemania llevaba cuatro victorias seguidas, Portugal (1-0), Holanda (2-1), Dinamarca (2-1) y 4-2 a Grecia en cuartos, por lo que era claramente favorito este jueves en Varsovia.

La clave del triunfo azzurro se dio por el dominio en los duelos personales más esperados, Mesut Özil-Pirlo en la medular, Mario Gómez-Andrea Barzagli y los metas Neuer-Gianluigi Buffon, pero también porque impuso su ritmo en el campo y sacó de punto a la máquina germana, menos vertiginosa que de costumbre.

Löw, que sorprendió a medias al volver a su equipo del debut del torneo, salvo la inclusión de Toni Kross por Thomas Müller, en la segunda parte intentó refrescar el juego con Klose por Gómez y Reus por Podolski, pero el resultado fue nulo.

En la primera parte, el veterano Gigi Buffon puso sus manos para tapar el peligro. Mats Hummels (5) de cabeza, aunque allí apareció Pirlo para despejar en la línea, un centro de la muerte de Boateng (13), un remate de Ozil (27) y poco más.

En cambio, Italia durmió el juego en el centro, hizo esfuerzos colectivos para detener a la generación de oro germana y los todoterreno como Montolivo incluso se animaron a llegar hasta Neuer (35), antes de dar un pase de 40 metros para dejar solo a Balotelli en el segundo grito italiano.

Con estas dos dianas más el tanto que gritó ante Irlanda en fase de grupos, Balotelli se trepó a la cima de la tabla de goleadores junto a Cristiano Ronaldo, Mario Gómez, Alan Dzagoev y Mario Mandzukic, aunque 'Balo' tiene la final para aspirar a la Bota de Oro.

En el segundo capítulo, Alemania intentó dinamizar, pero el empuje le duró apenas poco más de quince minutos, con bombas de Reus (48, 62), Lahm (50) y Khedira (55), pero siempre aparecieron las manos del capitán Buffon, la gran figura en la victoria.

Italia pudo golear con un par de disparos desviados de Claudio Marchisio (68, 76) y un mano a mano del ingresado Antonio Di Natale (82), cuando la Mannschaft se regalaba en el fondo en busca del milagro, que no llegó pese al tanto de Özil (90+2 de penal) en el descuento.

AFP